Parece que el verano va llegando a su fin. Extrañamente para lo que es habitual, el tiempo caluroso todavía nos acompañaba por aquí. Pero ya tocaba un poco de frío y que nos acompañara los colores e imágenes típicas del otoño, volver al cole y recuperar las rutinas de la vida cotidiana. Para mi es un tiempo de ebullición, de poner en práctica nuevas ideas y de darle forma a proyectos que se han ido fraguando durante el verano. No sé si es por ser madre, pero para mí los años van de septiembre a septiembre... Este año tengo ganas de poner en marcha cosas nuevas. Cerraré algunas puertas y abriré otras. Y para empezar, que mejor que estas imágenes que nos va dejando el otoño. ¿Cómo afrontáis vosotr@s la nueva estación?