La Realeza británica «acompañó» por unos minutos a John Lennon, en el parque capitalino que lleva su nombre.
La visita del príncipe Carlos de Gales y la duquesa Camilla de Cornualles a la Isla es noticia por estos días. Habiendo paseado la pareja nobiliaria por el Centro Histórico de La Habana, en compañía de su historiador, el doctor Eusebio Leal Spengler, los sitios capitalinos siguen acogiendo a las distinguidas personalidades que recorrieron ayer diversos puntos de la geografía citadina.
El Príncipe británico y la Duquesa aparecieron este martes en el parque John Lennon, ubicado en 17 y 8, en el Vedado, para apreciar la escultura del exbeatle, una obra del artista cubano José Villa Soberón, inaugurada el 8 de diciembre de 2000, en presencia del Comandante en Jefe Fidel Castro Ruz, como parte de una jornada de recordación que tuviera lugar en la Isla, para honrar la memoria de Lennon, en el aniversario 20 de su asesinato.
El Príncipe y su esposa llegaron en un auto MG TD, de 1953, que él mismo condujera. El espacio, «invadido» por personas de la comunidad y algunos coterráneos radicados en Cuba, fue testigo de la admiración de ambas figuras ante la estatua de Lennon, a cuyo lado se sentaron unos minutos.
Todo esto tuvo lugar después de que la pareja tuviera un encuentro con los miembros del Club de Autos Clásicos Británicos en la Isla, coordinado por Lupe Fuentes. La ocasión fue propicia para que el príncipe de Gales y la Duquesa conversaran con el artista visual Alejandro Sautié Viera, quien desarrolla un proyecto artístico relacionado con la presencia británica en Cuba, lo cual resultó de interés para la visita.
«La duquesa Camilla se acercó a mi auto y le llamaron la atención las transformaciones que le he hecho. Me hizo algunas preguntas sobre el carro y se interesó por mi proyecto denominado The Beatles car, comentó a Granma el artista, quien tendrá una participación performática, también asociada a la afamada banda (Listening to the Beatles, creating my beetles), en la Bienal de La Habana, en la que el auto ocupa un papel esencial.
Acto seguido al tope con los miembros del club, la pareja nobiliaria se llegó al Centro Cultural de Artex, El Submarino Amarillo, nombrado así en obvia alusión a uno de los más célebres temas de la banda inglesa, donde fue acogido por el grupo de Eddy Escobar y por Guille Vilar, destacado periodista y promotor cultural y director del Centro.
Uno de los lares a los que se llegó la duquesa Camilla fue a la sede de la Federación de Mujeres Cubanas (FMC). En el recinto, la esposa del Príncipe de Gales fue recibida por Teresa Amarelle, secretaria general de la organización, y departió con funcionarios de varias instituciones sobre temas asociados a la igualdad y la violencia de género.
Entre otros referentes, la dirigente dio parte de la misión de la FMC, espacio en el que tienen un lugar todas las cubanas, y explicó a la dama el modo en que en la Isla se abordan las temáticas por las que mostró interés. Para ella, la organización desempeña un rol muy importante, razón por la que la felicitó.
Otro de los espacios recorridos por la realeza fue la Zona Especial de Desarrollo Mariel, para interesarse por la construcción de un parque solar, capaz de generar 50 megawatt. El príncipe participó en el acto de Mariel Solar, con inversión británica, en presencia del Comandante de la Revolución Ramiro Valdés Menéndez, vicepresidente de los Consejos de Estado y de Ministros.
Sobre particularidades de la empresa, ofreció detalles su director Andrew MacDonald, quien explicó que el proyecto consta de tres áreas –Habana Libre, Trébol y Herradura– y que ya para septiembre podría empezar la generación de energía. El líder del proyecto esgrimió que el sector de la energía renovable tiene un gran futuro en el país caribeño.
En el acto de inauguración se encontraba Anthony Stokes, embajador británico en Cuba, quien dijo sobre este suceso económico que se trata de un ejemplo de Gran Bretaña de contribuir con el desarrollo económico cubano.
Para Rodrigo Malmierca, ministro de Comercio Exterior y la Inversión Extranjera, esta apertura significa otro momento positivo de las relaciones entre ambas naciones.
En la noche tuvo lugar un momento de cultura y cubanía en los predios del Gran Teatro de La Habana Alicia Alonso, donde se reunierona cuatro de las mejores compañías de danza de Cuba para ofrecerle una Gala al Príncipe de Gales, y su esposa la Duquesa de Cornualles.
La velada comenzó con el imprescindible Segundo Acto de Gisselle, propuesta del Ballet Nacional de Cuba, compañía que marca uno de los hitos históricos en el devenir de la cultura de la nación caribeña y del mundo.
Bajo la dirección del Maestro Miguel Iglesias, Danza Contemporánea acudió al discurso narrativo y crítico de la realidad, a partir de coreografías que arrancaron espontáneas aclamaciones del público.
Los ritmos africanos dieron paso a una obra del folclor arará, interpretada por el Conjunto Folclórico Nacional, una pieza de gran complejidad y ceñida a los referentes culturales propios del género.
Acosta Danza, una de las compañías que marcan el alto nivel de Cuba en dicho arte, ofreció Paysage, Soudain, La Nuit, con música de Leo Brouwer y coreografía de Pontus Lidberg, una pieza que se acerca a la cultura cubana a través de la rumba.
El cierre de la función estuvo a cargo de la compañía Santiago Alfonso, con La Conga, un momento danzario que buscó y logró la empatía con el público, mediante la apelación a los códigos de la danza más popular, sin perder su arraigo de rigor que debe caracterizar a un espectáculo de esta índole.
Este evento cultural, lleno de plenitud cubana y desenfado, fue una cortesía del Ministerio de Cultura de Cuba, y contó con la presencia de su más alto nivel, como el ministro Alpidio Alonso Grau, y los viceministros Fernando Rojas y Fernando León Jacomino. Entre el aplauso respetuoso del pueblo presente, el Príncipe Carlos y la Duquesa Camilla, saludaron amablemente la culminación de otro emotivo momento de agasajo.
(Con información de la página oficial del PCC)
La duquesa Camilla de Cornualles sustuvo un encuentro con especialistas cubanas, en el que se abordó el tema de la violencia de género. Foto: Ariel Cecilio Lemus