El otro día estuve cenando con un amigo en un restaurante ruso que me encanta (Fishka en Suero de Quiñones, 22) y os recomiendo. Ya lo hemos institucionalizado y espero seguir cenando allí una noche de las próximas 22 navidades.
El caso es que dentro de nuestra profunda y filosófica conversación, mi amigo me informaba de que los hombres, a cierta edad, follan con los ojos. Después de varias cervezas y una botella de vino, el tema tuvo mucho desarrollo.
Resulta, chicas, que a partir de los 35 olvidaros de echar un polvo si no vais remonas de la muerte: nada de zapato plano, caras lavadas y pelos a lo loco. Los hombres necesitan imaginar que debajo de ese pantalón ajustado llevas un tanga hilo-dental, no la faja de tu abuela de rodilla a cuello para poder meterlos. Olvidaros de la ropa interior color carne, esto es importante, cualquier color menos carne, por muy sexi que sea. Vamos, kk con ojos, claramente. Y depiladas, por Dios, cuanto más mejor, aunque en ese tema discrepo bastante, vale que cuides el jardín, pero lo de talar el bosque íntegramente me da un no sé qué….. Me gusta el pelo, soy asín de primitiva, qué le voy a hacer!!! Unos pelitos en el pecho (no en el mío, en el del susodicho imaginativo) y unos brazos fuertes y peludos, dónde va a haber algo más sexi!. Del pelo en la espalda puedo prescindir sin problema.
En fin, que si queréis follar a lo vivo, sin imaginar, hay que esmerarse mucho, pero mucho, mucho.