Uno de los objetivos que más se repiten entre los visitantes de Mar Azul, es el encuentro con la naturaleza. A su vez, habitualmente, los veraneantes confiesan que, en esta playa del sur geselino, buscan confort y calidad en la atención. Y, como es de esperar en cualquier descanso, la buena gastronomía no puede faltar. Pues bien, en las próximas líneas, Teleaire descubre y comparte con usted que, en esta parte de la Costa Atlántica bonaerense, hay para todos los gustos.
Veranear en familia, en Casabosque
La historia turística de Mar Azul no es muy larga que digamos. De hecho, dejando de lado los predios de acampe, Casabosque Apartamentos (2001) fue uno de los primeros emprendimientos con infraestructura equipada para recibir visitantes.
Ubicado a 3 cuadras del mar, sobre la Avenida 33, la arteria principal de Mar Azul, haciendo esquina con Punta del Este, Casabosque está compuesto por 9 unidades: 6 lofts de dos plantas; 2 suites en primer piso, y, finalmente, una cabaña totalmente construida con troncos. Todo alrededor de un parque arbolado que incluye la pileta y los juegos para niños.
Hay que tener en cuenta que aún en esos días de enero en que el sol no deja un resquicio de sombra, en Casabosque se respira aire fresco, y es debido a la gran cantidad de acacias y pinos marítimos bien conservados, sumado a la excelente ubicación del lote.Hay unidades de 2 y 3 ambientes, y cuenta con estacionamiento individual, además de los servicios habituales, como TV por cable. Sin dudas, Casabosque es ideal para ir en familia, pero también las parejas y los grupos de amigos aprovechan su cálida sencillez, la estética rústica típica de la zona, y sus parrillas.
Un secreto: para quien gusta de los amaneceres, el silencio del lugar a primera hora del día es verdaderamente encantador, porque sólo lo matizan los cantos de las diversas aves locales. No se prive, amigo viajero, de servirse el desayuno y sentarse a contemplar la salida del sol, o tenderse en la hamaca paraguaya a leer un buen libro.
Para reyes y reinas, Rincón del Mar
Por su parte, Rincón del Mar es, tanto como Casabosque, un ícono de la historia del lugar, porque abrió sus puertas en 2003, convirtiéndose, así, en el primer resort sobre la playa de toda la zona.
Su propuesta concibe detalles de mayor confort, como las camas king size, y su excelente servicio de spa. Por no hablar de que ofrece salida propia y directa a la playa. De hecho, incluso su diseño es tan exquisito que permite contemplar el mar cómodamente acostado en la cama de cualquiera de sus studios. El cielo y el Atlántico se ven desde cualquier ubicación. Increíble.
Rincón del Mar ofrece una cálida atención al visitante, y lo agasaja con sesiones de spa y masajes para relajarse. Además, la pileta cubierta y climatizada es un deleite y hace que este lugar sea elegido para visitarlo durante todo el año. En efecto, aún en ellos meses más fríos, la incomparable vista de todas sus habitaciones, más su reconocido desayuno buffet, convierten a Rincón del Mar en un lugar especial para disfrutar unas vacaciones largas, o, simplemente, una escapada de fin de semana, sin importar la estación del año. Cuando hace frío, la biblioteca y los juegos de mesa también aportan lo suyo.Comer a lo grande, en Palapa
Del vamos, Palapa resto & lounge se presenta como el primer restaurante 100% libre de gluten de la Costa Atlántica. Su propuesta innovadora conjuga platos deliciosos y totalmente gourmet (carnes, pastas y frutos de mar) con el uso de ingredientes que respetan el concepto de inclusión culinaria: todos pueden comer en Palapa.
Este restaurante se ubica dentro del predio de Rincón del Mar, y ofrece recreación para niños con profesionales. Combinando madera, piedra y vidrio, logra un ambiente incomparable, que se nutre, además, de la música en vivo, siempre bien seleccionada.Un detalle: el término Palapa remite a un tipo de construcción de origen filipino, y luego mexicano, cuyo techo se construye con palmas, o paja. Pues esa cualidad ha sido respetada en el restaurante. ¡Vale tomarse un minuto y llevarse buenas fotos!
Hotelería variada, naturaleza, confort, y gastronomía de primer nivel. E estos días cercanos a fin de año, quien pienseen pasar unas merecidas vacaciones disfrutando de las playas de la costa atlántica bonaerense, tiene motivos para elegir Mar Azul. ¡No se lo pierda!