La implantología es hoy una técnica con base científica que, desde hace más de 40 años, nos ofrece la posibilidad de sustituir los dientes de forma plena y duradera. Se trata de una intervención corta para una solución a largo plazo.
Los implantes dentales son unas fijaciones de titanio que se colocan en el hueso maxilar para sustituir las piezas dentales perdidas, lo cual nos permite reemplazar la pieza natural por una pieza artificial de mejor funcionalidad e igual o mejor estética.
¿En qué consiste la intervención?
Tras estudiar y planificar cada caso de manera individualizada, mediante pruebas diagnósticas necesarias (radiografías, T.C. etc..), el odontólogo coloca los implantes necesarios en el hueso maxilar. Para evitar molestias, se utiliza anestesia local o regional y se prescriben antibióticos, analgésicos y antiinflamatorios.
En 24 horas el paciente puede reanudar su actividad normal mientras espera que el implante se una al hueso, proceso que se conoce como oseointegración y que puede durar de algunas semanas a varios meses. Durante este periodo de espera, el paciente puede utilizar coronas, puentes o dentaduras provisionales con el fin de que en ningún momento se vea sin dientes. Una vez transcurrido el periodo de oseointegración, se procede a la toma de medidas para confeccionar en el laboratorio las coronas o dentaduras sobre implantes.
Ésta es la técnica convencional, pero son posibles otras opciones:
- Implante inmediato: el procedimiento consiste en la extracción del diente y en la colocación del implante en el mismo momento.
- Implante de carga inmediata: el procedimiento consiste en colocar en el mismo día los implantes y la prótesis, pero en estos casos es imprescindible que las condiciones óseas del paciente sean óptimas.
¿Son los resultados estéticos?
Los implantes dentales correctamente colocados garantizan unos resultados estéticos en la mayoría de los casos muy superiores a la dentadura original del paciente.
¿Cuáles son los beneficios que me aportan los implantes dentales?
Los beneficios son muchos pero los más relevantes son: preservación del hueso maxilar, mejora de la autoestima, comodidad, facilidad para comer, facilidad en el habla con respecto a las dentaduras convencionales que se mueven, durabilidad, etc.
¿Qué ventajas tienen los implantes dentales?
- Mantenimiento del hueso (lo fundamental es conservar hueso alveolar). El implante de titanio no es solamente un anclaje para la prótesis, sino una de las mejores técnicas de mantenimiento preventivo en la odontología.
- Dientes con una buena posición estética. Mediante un implante podemos colocar los dientes en una posición que favorezca la estética y fonética.
- Mantenimiento de la dimensión vertical. El perfil facial puede mejorar a largo plazo.
- Buena oclusión.
- Mayores porcentajes de éxito: ofrecen mayor longevidad. Los estudios de supervivencia a los 10 años de las prótesis fijas sobre dientes naturales se aproximan al 75% en el caso de los implantes se aumenta a 95%.
- Aumento de la fuerza oclusal: la fuerza oclusal máxima puede aumentar en un 85% una vez completado el tratamiento.
- Mayor función masticatoria.
- Mayor estabilidad y retención que las mucosoportadas. La retención mecánica de los implantes es superior.
- Mejor fonética: al ser estables, no producen chasquidos como las prótesis convencionales.
Contraindicaciones absolutas de los implantes dentales:
- Problemas graves de medicina interna. Por ejemplo, artritis reumatoide.
- Trastornos del metabolismo óseo. Por ejemplo, la osteomalacia o la osteogénesis imperfecta. La osteoporosis no representa ninguna contraindicación para la colocación de implantes dentales.
- Trastornos de la coagulación no controlados.
- Alcoholismo, drogadicción. Psicosis.
- Sistema inmunológico debilitado. Los pacientes con inmunosupresión provocada por infecciones víricas (VIH) o una determinada medicación (corticosteroides, quimioterapia oncológica u otros inmunosupresores) pueden presentar problemas de cicatrización así como una reacción inadecuada del sistema inmunológico.
- Enfermedades endocrinas no controladas.
En definitiva, podemos decir que la mejor opción terapéutica, duradera a largo plazo y conservadora son los implantes dentales.
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