El mítico diseñador Jeff Minter, creador de joyas como Tempest y Space Giraffe, nos trae su nuevo shooter de la vieja escuela, vamos un matamarcianos de toda la vida, a la consola portátil de Sony, PSVita, la cual, poco a poco se está haciendo un catalogo de juegos indies muy a tener en cuenta.
TxK, como su propio autor define, es un juego de estilo “neo-retro”, es decir, un titulo de marcado aire arcade ochentero que aprovecha el hardware gráfico actual, sin perder su esencia original por supuesto, y sobre todo las posibilidades sonoras, que en este título son espectaculares. Títulos que siguen esta tendencia surrealista de luces, colores y un acompañamiento musical sobresaliente, son “Geometry Wars”, mi adorado “Rez” (sobre todo la revisión que se hizo para 360) y Child of Eden (aunque éste con un apartado visual mucho más avanzado).
Este nuevo lanzamiento podríamos decir que es el sucesor espiritual de Tempest (por cuestiones legales no se puede usar este nombre, al ser propiedad de Atari), es decir, un adictivo shooter vectorial, donde prima la sencillez, pero no por ello quiera decir que sea simple, sino más bien lo podríamos definir como EXTREMADAMENTE ADICTIVO. La mecánica del juego consiste en eliminar a los enemigos que aparecen en el fondo del túnel (tube) lo más rápido posible, evitando sus disparos y ellos mismos, ya que avanzan hacia arriba dispuestos a ‘pillarnos’. Nos moveremos en diferentes circuitos geométricos, que van cambiando su forma fase a fase (nos encontraremos con cilindros, cubos, laminas, forma de W, …), y que forman parte también de la esencia del juego. Al morir, los enemigos liberaran los clásicos “power ups” que variarán desde una nave satélite que te ayudará en tu cometido, hasta vidas extras, potenciadores del disparo, y lo más divertido, la capacidad de saltar, muy útil cuando los enemigos llegan al final de túnel y tengas que sortearlos.
Los gráficos son espectaculares sin renunciar a su diseño clásico
En control es muy sencillo e intuitivo, debido a que nuestra nave recorrerá un carril que formara la pieza geométrica que corresponda a la fase en la cual estemos (todo visto desde una cámara en tercera persona), y dicha sencillez viene dada porque el movimiento será de izquierda a derecha sin mas complicaciones. Todos estos movimientos se pueden realizar tanto con la cruceta, como con el stick, aunque yo recomiendo la primera opción, al ser más precisa.
La mecánica 'Tempest' siempre ha sido muy adictiva
Pero si hay algo que hace a TxK especial, son sus tres puntos fuertes, graficos, jugabilidad, banda sonora. Los gráficos, sin dejar de ser de carácter retro, son un espectáculo de color y fuegos artificiales, todo muy psicodélico, que hacen que te quedes prendado de lo que estás viendo, aunque en ocasiones dichos efectos pueden llegar a confundir y provocar que perdamos una vida tontamente. Aquí se nota el salto generacional del que hablábamos. Jugablemente es una maravilla, 100 niveles a superar, tres modos de juego: ‘Pure Mode’ (un modo historia al uso, es decir del nivel 1 al 100), ‘Survival’ (dos vidas únicamente, sin bonus, sin vidas extras, hasta lo que logres aguantar) y finalmente el ‘Classic Mode’ (empiezas desde el nivel que quieras, que ya lo hayas superado previamente en el Pure Mode), diversión, adicción y sobre todo una rejugabilidad a prueba de bombas.
Evita que los enemigos lleguen a la parte superior de la pantalla
Y para el final dejo el apartado que más me ha gustado, el apartado sonoro. TxK tiene una banda sonora espectacular. Temas de marcada tendencia electrónica que se complementan a la perfección que la mecánica del juego, ya que según vayamos realizando acciones, como recolectar power ups o matar enemigos, los acordes de la música irán interactuando con lo que haces. Este punto me recordó, no llegando al nivel de ese juego que casi es un shooter musical, al genial Rez del maestro Mizuguchi. En definitiva un valor añadido muy potente a disposición de este gran título.
Cuando conseguimos el 'salto' la cosa cambia... a mejor
Otro punto que no se puede dejar escapar, son las clásicas fases de bonus, las cuales a diferencia del resto del juego, se manejaran con el giroscopio de la consola al tener recorrer unos portales para así aumentar nuestra puntuación. Este un punto, que puede gustar más o menos, aprovecha las características de PSVita, adaptándose a las tendencias actuales, aunque a título personal no termine de convencerme.
Multiplicadores, gran invento
En conclusión, TxK es un juego ideal para la plataforma portátil para el cual se ha diseñado, juego rápido, sencillo, jugabilidad excepcional y gráfica y sonoramente impactante. Recomendación para todos aquellos amantes de los matamarcianos y los arcades sin mayores complicaciones, géneros que poco se dejan ver por estos tiempos que corren, aunque si los pocos que nos llegan son como TxK, bienvenidos sean. Un hurra para Minter por seguir en la brecha desde tiempos inmemoriales, totalmente ajeno a las modas, independiente y haciendo lo que le gusta, y un hurra para los amantes de los juegos clásicos, que aquí tenemos mucha chicha que ‘cortar’.
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TxK está disponible en la PSN para PSVita