Impresiones Dead or Alive 6 – Una entrega que busca ser diferente

Nos ponemos a los mandos de una de las series más veteranas dentro del género de la lucha.

Entre la lista de juegos que tuvimos ocasión de jugar en las oficinas de Koch Media hace poco, una de las sorpresas, por no estar avisados de antemano, fue Dead or Alive 6.

La veterana saga de lucha anunció este sexto título en la franquicia durante el E3 2018 de hace unos meses, y desde entonces hemos ido recibiendo información poco a poco sobre las novedades y el enfoque que prometen desde el Team Ninja y Koei Tecmo.

Curiosamente, tal y como pudimos atestiguar, el mayor cambio de Dead or Alive 6 con respecto a pasados juegos no estará tanto en la jugabilidad, como en la nueva imagen que quiere darle el estudio.

Sus responsables ya han declarado que quieren dejar atrás la visión en exceso sexualizada que ha tenido la saga desde sus comienzos, y que pretenden que con este sexto juego sean tomados más en serio dentro de un género cuya popularidad está muy alta y el nivel competitivo es muy fuerte.

Así comprobamos de primera mano que es cierto que se ha trabajado en las físicas de los pechos de las luchadoras femeninas, ya normales y no irreales y cómicas como en el pasado. También en su imagen, prescindiendo, dentro de lo que pudimos ver, de atuendos claramente enfocados a que sea vea mucha carne. Más allá de esto, en nuestro contacto con el juego no pudimos comprobar hasta qué punto este Dead or Alive 6 se va a tomar a sí mismo más en serio.

Otros cambios, sin embargo, sí están dirigidos a la jugabilidad del título, y a ofrecer nuevas opciones en las peleas.  Éstas últimas resultarán en duelos más espectaculares de lo visto hasta ahora en la saga.

La barra Break Gauge es el elemento más novedosos que van a encontrar los que ya hayan jugado a anteriores títulos. Se trata de un medidor bajo la barra de vida, que según se vaya rellenando nos va a permitir realizar algunas cuantas acciones de lo más vistosas que pongan la pelea a nuestro favor. Un Break Blow, que permite esquivar y golpear al mismo tiempo, un Break Hold, que devuelve golpes medios, altos y bajos, o un Fatal Rush, que lanza un combo devastador, son todos movimientos que solo podemos realizar con la nueva Break Gauge llena.

Pero en Dead or Alive 6 vimos que el entorno también es muy importante en pleno combate. En este sentido regresan las zonas Mass Destruction, con secciones enteras que pueden destruirse, o que permiten cambiar de escenario a la par que hacemos daño.

Aparte también se han añadido dos tipos nuevos de peligros en los escenarios, una son las áreas Rumble Danger, como la del escenario The Throwdown. Aquí estamos en un entorno de peleas callejeras, y lanzar a nuestro rival contra los espectadores hace que nos lo devuelvan desequilibrado y débil, perfecto para proseguir con nuestro ataque sin que pueda defenderse. Otras son las Zonas de Peligro, dónde sufriremos mucho daño si acabamos en ellas. En el mapa de Forbidden Fortune, ésta se manifiesta en la forma de un pulpo gigante que nos zarandea y golpea antes de devolvernos al combate.

Todas estas técnicas no solo serán dignas de ver, también añaden una nueva profundidad a un sistema de combate que no había cambiado mucho desde sus inicios.

En lo visual el juego mejora lo ya visto en Dead or Alive 5, pero sigue sin ser un portento técnico dada su estética más anime que realista. Sí nos llamaron la atención, no tanto los modelados de los luchadores, como el deterioro que sufrían en plena pelea, con heridas que sangran, magulladuras o ropas que se rasgan y se estropean. Esto estaba muy logrado.

En resumidas cuentas, y aunque no pudimos jugar más que unos cuantos combates en una demostración jugable bastante limitada, las impresiones fueron positivas. Dead or Alive 6 agradará a los aficionados de la franquicia. Lo que está por ver es si sus novedades atraen a nuevo público. Saldremos de dudas el 15 de febrero del próximo año, cuándo salga para PlayStation 4 y otras plataformas.