Revista Cine
POR FIN ha llegado a España y POR FIN la he visto. Vamos a comentarla sin preámbulos que valgan, que ya es hora. A estas alturas, por cierto, me veo con libertad para meter SPOILERS a saco.
Mirad, tras un viaje de 15 años lleno de altibajos que ya os comenté, tras uno, dos y tres live tweets, habiendo convertido a Spiderman en una parte prácticamente cotidiana de mi vida, y teniendo claro, solo con lo visto en Civil War, que el personaje estaba en buenas manos, he estado muy tranquilo con esta peli. Mis expectativas estaban muy claras desde el año pasado: tenía la certeza de que esta iba a ser una cinta pequeñita y sin grandes ambiciones, con espíritu de "esta es solo la primera entrega de muchas", y en la que el punto fuerte iba a ser precisamente Spiderman. Porque al fin y al cabo la clave de Marvel Studios es hacer unos protagonistas tan sólidos que cuando estén todos juntos y cada uno tenga solo unos pocos minutos puedan derrochar personalidades claras y únicas.
Y eso es exactamente lo que me he encontrado.
Primero, hablemos de lo más importante, eso que sabíamos desde Civil War: madre del amor hermoso, ahí esta. Lo han conseguido. Ese es Peter Parker/Spiderman. Las cosas como son, la emoción al descubrir esto la sentí con su anterior aparición, pero aquí se confirman y amplifican esas sensaciones y se comprueba que saben muy bien quién es, qué tipo de aventuras vive, qué decisiones toma y cuál es, como buen héroe Marvel, su correspondiente handicap vital. Es simple: al ver imágenes del personaje en los créditos, sentí lo que siento siempre al ver a Spidey y lo relacionaba con total facilidad con lo visto en la película. Algo instintivo, sin reflexiones, sin tener que analizar nada.
Y la peli tampoco lo hace. Es un caso particular en la filmografía de Marvel. Por primera vez, no necesitan construir al héroe, porque la audiencia ya lo conoce de sobra. Nunca se nos explica lo del poder y la responsabilidad ni se explora a fondo el peso de ser Spiderman. Porque ya se hizo en dos películas que marcaron al género y a toda una generación. ¿Para qué repetirlo? o qué, ¿se van a poner a intentar reinventar la rueda reformulando las bases inamovibles del personaje después de que otras dos películas más recientes ya lo intentasen con resultados que es mejor no recordar? nah, en lugar de eso apuestan por una tercera vía, por un camino nunca antes recorrido: hacer, simplemente... una aventurilla maja de Spiderman. Lo que vendría a ser un arquito sin pretensiones de su serie regular, dejando que el personaje sea él mismo, sin tratar de redefinirlo o explicarlo o recordarnos quién es. Con verle ya queda claro, porque para eso Spidey funciona con una de las fórmulas más claras y atractivas del mundo. Una fórmula, por cierto, que no gira obligatoriamente en torno a una historia de amor. Ha tenido que llegar Marvel para que se vea eso.
Pero esto no puede ser simplemente un capítulo cualquiera de una serie, es una película, y por tanto debe haber algo más de chicha. El arco elegido para esta primera entrega es muy apropiado y, de nuevo, nunca antes desarrollado en el cine: el paso entre ser un crío disfrazado con más buenas intenciones que otra cosa y un superhéroe hecho y derecho... pero siempre en una categoría inferior a la de pesos pesados, porque a fin de cuentas este es Spiderman, e incluso cuando es Vengador tiene ese toque de "tío normal metido en algo que le supera".
Que sea él mismo el que decida quedarse en esa categoría inferior es una decisión totalmente esperable del personaje, una de las muchas muestras de que los responsables del film y de este universo tienen pillado de qué va el asunto con una confianza y sencillez que hacen que esto parezca fácil.
Pero también es el final idóneo para el arco de autodeterminación en el que descubre lo que vale y qué tipo de héroe es. Algo sencillo narrado de forma sencilla mediante puntos clave en el tercer acto que cualquier fan celebrará: dejar plantada a la chica de sus sueños porque TIENE que ir a detener al malo, aunque sea sin su traje tecnológico de la leche. El momento de los escombros, homenaje claro al pico de la etapa inicial del personaje en los cómics y que además nos deja con la clásica imagen de la cara dividida. Y la decisión, inmediata, sin darle vueltas, sin dudar, sin darle importancia, de salvar a su enemigo. Buen trabajo, ni más ni menos.
Aunque este viaje no es, ni lo pretende, ser algo tremebundo lleno de profundidad que nos reviente la cabeza. Coño, si es que la peli apenas pretende contar nada relevante. Y eso es un contrapunto que no se puede pasar por alto, hablaremos de ello, pero antes quiero insistir en la maravillosa sensación de familiaridad, de comodidad, de, yo qué sé, "estar en casa", que consigue la película. Lo cual es gracioso porque la decoración de la casa es completamente diferente. Diría que, aunque este es un Peter primerizo, han aprovechado muchos elementos introducidos en cómics más modernos en los que ya era adulto y estaba curtido. La intención es, por un lado, integrarlo de lleno en el MCU, porque al fin y al cabo ese es el gran atractivo de esta versión, y por otro, mostrar en pantalla cosas nunca vistas fuera de los tebeos, porque son conscientes de que esta es la 6ª película del personaje en 15 años. Así que Iron Man es su mentor y protector, como lo fue en los tiempos previos a la Civil War comiquera, pero lo es ahora que Peter es un crío porque es cuando más lo necesita y porque, como apuntaba, es lo más coherente para hacerle parte de este universo compartido. El traje es ultra-tecnológico, como en la etapa actual de los tebeos. Tía May descubre ya mismo el pastel en el último gag de la peli porque ya es hora de explorar en el cine esa faceta de su relación. La propia May y los compañeros de clase de Peter son considerablemente diferentes porque estamos en 2017 y han querido hacer una peli para niños y adolescentes de 2017. Y todos esos secundarios funcionan a la perfección y crean un "mundo" con identidad propia pero al mismo tiempo maravillosamente integrado en el MCU que no se parece a nada de las películas previas.
Hasta han cogido prestado a Ganke (aunque le han puesto el nombre de otro personaje por motivos que no me explico) del Spidey de Miles Morales porque... porque es una idea cojonuda y una novedad muy bienvenida para la imagen cinematográfica del Trepamuros.
Lo dicho, un contexto, un mundo, totalmente nuevos en base a mezclar elementos de los cómics que el gran público desconoce. Un "feeling" muy distinto a lo visto hasta ahora.
Pero, oh, amigos, lo importante está ahí y es lo que me ha dado esa sensación tan bonita de familiaridad que apuntaba antes. Por un lado está la aventura de Spidey en sí, que capta como nunca la idea de ver a tu colega metiéndose en líos de una forma que te hace pensar "ay madre, a ver cómo sale de esta" al mismo tiempo que te lo pasas pipa porque Spiderman es el personaje idóneo para vivir aventuras. Es mi gracioso, intrépido, inteligente y a la vez desesperantemente torpón amistoso vecino. Me iría con él al fin del mundo. Es el único personaje con el que, cuando las cosas se ponen serias y totalmente en su contra y aun así se levanta una vez más y hace sin dudar lo correcto aunque le vaya la vida en ello, no siento solo la admiración habitual que con otros, sino... orgullo. Pienso "ese es mi chico". Ese es el gran triunfo del film, ¿no? transmitirme todo eso.
Pero hay más. Una sucesión constante, de "oh, cómo no, por supuesto". Al final de la peli Liz le dice "últimamente te disculpas mucho, ¿por qué es esta vez?". Y lo dicho: cómo no, por supuesto. De eso se trata. Peter es ese chaval evidentemente majo que sin embargo nunca acaba de caer bien y ser popular, ya que queda fatal a cada momento... por tener que ir a hacer lo correcto. No es que en esta ocasión Peter se lleve un palo emocional de los que marcan, de los que tendrán consecuencias en las siguientes. Nada en la peli es tan importante. Pero el caso es que todo son pequeños momentos en los que las cosas le salen mal y casi puedo oír en sus pensamientos interminables monólogos internos en los que es consciente de lo pringao que es y no hace más que autocompadecerse visiblemente irritado por fallar a la gente que le importa.
Quizás ayude que Tom Holland es, ahora ya se puede decir alto y claro, el Christopher Reeve de Spiderman. Todo perfecto. Clavado. Todas las características que adoramos de Peter están en el guion, sí, pero Holland no solo me hace verlas, es que me hace darlas por sentado como si llevase viendo a esta encarnación del personaje toda mi vida.
En fin. Eso. Que misión cumplida. Marvel nos ha dado a Spiderman. Ya sabéis que adoro y aplaudo lo que Raimi hizo en las dos primeras, esas siguen siendo LAS películas de Spiderman y el retrato más profundo y elemental del personaje en el cine hasta ahora, pero si hablamos del icono, del personaje que hemos tenido en muñecos, mochilas, pijamas, y demás merchandising, del de casi todas las series de dibujos, del de los tebeos, de ese al que verdaderamente le pega el tema musical de los 60, del que transmite aunque sea a nivel muy primario todo lo que he intentado explicar... Este. Este es.
Dicho eso, pues hombre, sí, me hubiese gustado que pasase algo más relevante que dejase más huella. Quiero decir, dando por muy válida la apuesta del film de ser solo una aventurita mundana, oiga, podría haber sido mejor. Más divertida, imaginativa, trepidante, emocionante y sobretodo, con mejores escenas de acción. No es que esta no sea nada de eso, ojo, es una peli muy maja que he disfrutado de principio a fin y eso es lo que importa, pero no es una aventura tan guay como para no dejarme con ganas de más mandanga, algo más jugoso. Y es que, como decía, en cuanto a su vida personal tampoco es que haya nada que nos mantenga en vilo hasta la siguiente peli. Echo en falta más profundidad en las relaciones entre personajes, más culebrón, vaya que sí. No sé, como que se nota demasiado que la mentalidad ha sido "esta es solo la primera de muchas, no gastemos ninguna bala". Incluso creo que, clavando como han clavado al personaje, hubiese sido muy rico ahondar algo más en él, en sus preocupaciones, temores y motivaciones. Se podría haber hecho, creo, sin tener que tirar de elementos ya vistos en pelis anteriores y sin renunciar en absoluto al tono ligero, adolescente y cotidiano.
Pero oye, tampoco me voy a poner gilipollas: es un divertimento sólido, ligero, sin pretensiones, con un entorno majísimo lleno de posibilidades, infinidad de pequeños momentos adorables y coñitas cojonudas, y protagonizado por el mejor personaje del mundo en su retrato cinematográfico, si bien no más profundo y resonante a nivel dramático, sí más carismático y fiel a la fuente. Cómo voy a quejarme de nada si lo que quiero es verla otra vez.
Comentemos otras cosas muy rápidamente:
El Buitre está bien. No me ha flipado como a mucha gente pero su motivación es sólida, supone una auténtica amenaza para Spidey, Michael Keaton nunca falla y el giro de que sea el padre de Liz es COJONUDO. Una muestra de lo bien que puede salir a veces distanciarse de los cómics. Es que es perfecto, no solo por la tensión de la escena sino porque Peter empieza a quedar mal, a comportarse de forma incómoda, ¡y solo nosotros sabemos porqué! ¡¡AAAARGH!! Ay, pura magia Spiderman.
También es genial la naturalidad con la que se introduce no solo al Buitre sino al Chatarrero, al Conmocionador, y se va tanteando el terreno para el Escorpión y el Merodeador (versión Ultimate, lo cual nos lleva a Miles Morales, a quien de hecho menciona). Vaya tela. ASÍ se van introduciendo villanos de cara al futuro de forma que encaje con Spiderman. No con conspiraciones sino con una especie de "comunidad criminal de barrio" que a nosotros nos hace sonreír pero al gran público no le distrae.
Sobre Michelle: me ha molado mucho el personaje, pero es MJ sí o no. No entiendo ese juego. Me parece bien que sea Mary Jane, pero que lo sea. Que sea Mary Jane Watson. Pero si se llama Michelle, por mucho que la llamen MJ, pues vaya tontería.
El papel de Iron Man es el esperable, correcto. Relación apropiada con Peter. Pero Tony es un personaje tan interesante y tan importante en el MCU que me quedo con ganas de saber en qué punto está tras Civil War. ¿Cómo le va? ¿Está mejor? ¿Cómo se reconcilió con Pepper? ¿¿Se van a casar?? QUIERO SABER.
Los vídeos del Capi son brillantes. El CONCEPTO de que en pleno furor tras la aparición de los Vengadores (el traje delata cuándo se grabaron) le pidiesen esto Y ÉL ACEPTASE es sencillamente glorioso.
Y yo creo que ya está todo cubierto. Spiderman está en casa, cargado de novedades, y vuelva molar. Realmente no hay nada más importante.