Al ritmo tan vertiginoso que avanza nuestra sociedad y con la notable evolución del cine, pasado un siglo, es normal que cada vez cueste más sorprender al espectador con lo que llamamos puntos de vista futuristas. Intentos vagos como el de "Aeon Flux" no pudieron acercarse a la espectación que causó "Blade Runner" en los ochenta. En mí opinión "In time" tiene ese algo especial que le hace funcionar, que te hace creer en el film y que se muestra refrescante y sorprendente. Desde luego, jugando con las reglas del juego de Hollywood, pero con elegancia.
Estoy seguro que si el film hubiera sido de Scorsese y estado protagonizado por Di Caprio, la crítica hubiera ensalzado el film colocándolo como candidato a algún tipo de "Oscar". Porque en el fondo contamos con una historia con similitudes a "Origen", pero incluso más clara y directa (menos inteligente tal vez). Os dejo, como siempre, una breve sinopsis:
"Ambientada en una sociedad futura. El hallazgo de una fórmula contra el envejecimiento trae consigo no sólo superpoblación, sino también la transformación del tiempo en moneda de cambio que permite sufragar tanto lujos como necesidades. Los ricos pueden vivir para siempre, pero los demás tendrán que negociar cada minuto de vida, y los pobres mueren jóvenes. Después de conseguir, por casualidad, una inmensa cantidad de tiempo Will Salas (Justin Timberlake), un joven obrero, será perseguido por unos policías corruptos conocidos como "los guardianes del tiempo". En su huida Will tomará una rehén (Amanda Seyfried), una joven de una familia adinerada". (filmaffinity.com)