En otro post te hablé sobre el método BLW. Recordemos que son las siglas de Baby Led Weaning, lo que viene a ser algo así como alimentación autorregulada por el propio bebé, quien en esos instantes lo está practicando, pero hay veces en las que no sabe muy bien qué está haciendo.
En esta entrada, voy a contarte algo que no todos saben o, al menos, no te cuentan. Esto es como la luna, también tiene su cara oculta. En mi trabajo, todos practican o practicaron el dichoso método y yo solamente lo puse en práctica de vez en cuando o de forma parcial en las comidas de mi niño por las razones que voy a desglosarte a continuación. Pues bien, o yo soy muy raro, o debo vivir en la época de las cavernas. No me lo dijeron directamente, pero sus miradas ya hablaban por sí solas, incluso algunas cuchicheaban con otras… 😂😂.
Desde mi cueva, voy a desvelarte algunos peligros e inconvenientes que entraña el BLW y a los que expuse a mi niño sólo a veces, por probar cosas nuevas, para que no se aburriera de mis tradicionales potitos caseros.
¿Cuáles son los principales inconvenientes y peligros del método BLW?
El primer peligro y el más obvio es el atragantamiento. Cuando todo ser maternal te recomienda seguir este método de alimentación para bebés, nadie te dice esto. Puede que esperen que tú saques los peligros con tus propias conclusiones. Los expertos y profesionales, por su parte, lo primero que te recomiendan es que adquieras unas nociones básicas de primeros auxilios por si se da el caso de atragantamiento. No quiero alarmarte ni estoy en contra del método BLW, pero ya ha habido varias muertes por atragantamiento en bebés por no saber actuar ante esta situación. Que el niño pueda autoalimentarse, no quiere decir que puedas dejarlo comiendo a sus anchas sin vigilancia alguna. Para minimizar este riesgo, procura cortar todos los alimentos de forma distinta a la tráquea del bebé o machacarlos para que pierdan esa forma. Lo idóneo es cortarlos en tiras cuadradas o aplastadas.
Otro inconveniente que podría llegar a ser peligroso consiste en que el niño no ingiere la misma cantidad de comida y, por tanto, de nutrientes, cuando la comida es triturada y cuando practica el BLW. Esto puede crear un desequilibrio nutricional por la carencia de vitaminas necesarias, que no llegan a alcanzar la necesidad energética del niño. Como consecuencia, esta situación puede acabar en anemia, estancamiento del desarrollo del niño y que apenas gane algo de peso.
Un inconveniente más, aunque éste no es grave, sino un engorro, es que ya puedes estar preparado para limpiar todo cuando el niño termine de comer. Va a acabar todo con restos de comida: la trona, el suelo, la ropa del niño, puede que su pelo también… Pero esto, ya es un mal menor comparado con los otros dos anteriores.
Para terminar, a modo de anécdota y volviendo al tema de los atragantamientos, voy a comentarte algo, aunque no tenga nada que ver con el método BLW. Los caramelos, además de tener una forma peligrosa y ser duros, por lo que el bebé no puede masticarlos correctamente, no debería tomarlos. Hay alternativas mucho más sanas, aunque pienses que, por dárselos en contadas ocasiones, así como bollería y otras tantas cosas, no pasa nada. En la analítica que tuvimos que hacerle al niño hará sobre un mes, el pediatra nos felicitó por tener todos los valores dentro de los límites, sobre todo los del colesterol. Nos comentó que la mayoría de los niños de su edad doblan el máximo. ¿En qué piensan esos padres?
Y tú, ¿practicas el método BLW? ¿Conocías estos inconvenientes?