El proyecto de ley dirigido a eliminar el consentimiento informado previo a la donación de órganos, se
debate, a nivel público en Escocia, antes de ser presentado al
Parlamento para su aprobación. En este sentido, la posición de la
Iglesia Católica se ha manifestado contraria al cambio de la ley que
rige actualmente, que exige el consentimiento informado del paciente
fallecido o de sus familiares, previamente a la donación de órganos.
La legislación actual establece "como condición para la donación de órganos que
haya habido un consentimiento previo del donante o de sus familiares, lo
que hace posible la donación de órganos, basada en un acto de
desinteresado y voluntario del donante.” La Iglesia, continúa diciendo
la declaración, “es una entusiasta partidaria de la donación de
órganos, basada en una libre y consentida donación, pero entiende que
ésta no es posible si el donante o sus allegados no han dado un
consentimiento explícito".
Recordemos que España sigue siendo el país más solidario del mundo en lo que a transplantes y donaciones de órganos se refiere. Pero eso no debe ir en menoscabo de respetar el derecho de autonomía del paciente. La legislación actual en España presupone que todo ciudadano mientras no diga lo contrario es un donante de órganos. En la práctica, siempre se pregunta antes al paciente o a los familiares. El consentimiento informado parece lo más adecuado.