Un estudio de universidades estadounidenses y británicas en más de 350 familias ha descubierto que la inestabilidad marital cuando los niños tienen 9 meses de edad podría afectar al sueño de los pequeños y predecir sus problemas para dormir cuando tienen 18 meses. El trabajo se publica en la revista 'Child Development'.
La inestabilidad en la relación de los padres cuando los niños tenían 9 meses predecía las dificultades para quedarse dormidos y dormir bien cuando los niños tenían 18 años.Los investigadores evaluaron la relación entre la inestabilidad marital, por ejemplo, padres que se están planteando el divorcio, y los problemas de sueño de los niños como dificultades para quedarse dormidos o mantenerse en este estado.
El estudio se basó, en parte, en la posibilidad de cambios en los sistemas cerebrales implicados en cómo los niños desarrollan y regulan sus patrones de sueño refleja el impacto del estrés de la familia sobre los niños.