Internet está inundado de advertencias sobre una nueva forma de ser infieles sin siquiera saberlo. El llamado “micro-cheating” o “micro-engaño”, es una de las maneras de ser infiel en la era digital.
Una de las preguntas claves es ¿cómo saber si tu pareja te engaña por el móvil?En lugar del contacto físico, los micro-engaños hacen referencia a distintas actividades que se dan en un entorno digital, en su mayoría aplicaciones de redes sociales tales como Instagram. Darle “Me Gusta” a una publicación de Instagram de seis meses de tu ex o enviar emojis con un doble sentido romántico o sexual (¡la berenjena!) son algunas de estas conductas.
Algunas de las prácticas más comunes de “micro-cheating” en las redes son las siguientes:
Reconectar con tu ex
Buscar a tu ex en Instagram no es engañar. Ver la actividad de una persona en Instagram puede ser una manera de aliviar cierta curiosidad y empezar a seguirlo puede ser visto como una manera de establecer contacto con alguien conocido para ampliar tu red.
Pero si mantienes un ritmo constante de conversación comentando frecuentemente las fotografías que publica,le envías mensajes a las 3 am para felicitarlo por su nuevo trabajo, y te quejas de que tu pareja actual no te entiende en las conversaciones de mensajería directa, entonces es posible que estés cruzando un peligroso límite.
Enviar emoticones sugerentes o de doble sentido
En este caso no se vale apelar a la ignorancia. A menos que seas un chef o un vegano, un emoticón de berenjena significa solo una cosa. Otros emoticones que se deben usar con precaución incluyen el emoticón del boleto “admitir uno” (especialmente arriesgado cuando se combina con el emoticón de la cama); el emoticón de durazno; el emoticón de la cara con la lengua afuera, o el emoticón de fuegos artificiales.
Dar “Me gusta” en Instagram a publicaciones antiguas
Si has hecho clic en una publicación en Instagram publicada hace más de 53 semanas y no es un miembro de tu familia, esto se traduce en una muestra de interés que puede resultar muy obvia para tu pareja (si se llega a dar cuenta o es usuaria de una aplicación espía, claro).
Ciertamente es bastante común el revisar en profundidad las cuentas de Instagram de otras personas, revisar los cambios de domicilio, sus parejas anteriores y el paso del tiempo. Pero hacerlo abiertamente en la cuenta de Instagram de un tercero que podría ser un interés romántico da un mensaje nada sutil.
En busca de diversión sin compromisos
Las personas que recurren a este tipo de prácticas, no necesariamente quieren dejar a sus parejas. Comúnmente ven este tipo de experiencia como un añadido de emoción.
Sin embargo, es importante tener presente que toda tecnología es un arma de doble filo, y que este tipo de micro-engaños dejan rastro en las redes, especialmente si saben cómo meterse en el Instagram de otra persona, lo cual puede reflejar evidencia contundente que podría acabar con una relación.
Encuestas recientes indicaron que un 72% de las mujeres no escatima cuando llega el momento de espiar los móviles de sus parejas, y las tiendas de aplicaciones cuentan con cientos de opciones, muchas de ellas incluso gratuitas con nombres bastante atractivos que facilitan hacer esta tarea de monitoreo y control.