Además de disfrutar de su sabor, tomar té tiene otras ventajas, una de ellas es que ofrece relajación producida por algunas infusiones de hierbas.
Tés como el de tila, manzanilla o melisa, son algunas de las variedades que se pueden preparar en casa de una manera sencilla y con grandes beneficios.
“Lo ideal es tomar una taza antes de dormir para que tenga un mejor efecto, pero se pueden consumir dos o tres veces al día”, comenta la nutrióloga Carmen Gutiérrez.
Sólo las mujeres embarazadas deben abstenerse de tomarlos, pues algunos contienen cafeína o sustancias que no se aconsejan en esta etapa. En estos casos se recomienda consultar al médico antes de consumir cualquiera de estas opciones.
Ansiedad e insomnio
Los tés de limón y de naranja actúan contra estos males. Usa las cáscaras de éstos, hiérvelas en agua y endúlzalas con miel de abeja.
Para relajar el sistema nervioso
Prepara un té con tres cucharadas de frambuesas frescas y agua al gusto.
El té de tila también te relaja. Hierve sus hojas secas, cuélalas y endúlzalas.
Mente calmada
Mezcla dos cucharaditas de melisa y manzanilla, posteriormente hierve en agua estas plantas. De esta forma, obtendrás un té tranquilizante.
Contra la tensión
Para relajarte, toma tés de pasiflora, valeriana, azahar o romero. Éstos disminuyen el dolor de cabeza y combaten el insomnio producido por el estrés y la ansiedad.
Fuente: Esmeralda Martínez