Camaradas,
Gran Bretaña ha decidido cortar a partir de hoy las relaciones diplomáticas con Rumanía debido a la creciente presencia de tropas alemanas dentro de su territorio, lo que a la postre, y según los británicos, constituye una fuerza expedicionaria en toda regla dotada de todos los suministros, municiones y combustible necesarios para llevar a cabo acciones ofensivas. Según sus propias palabras: “El territorio rumano está siendo empleado por Alemania como una base militar en previsión de sus planes para proseguir la guerra. Estas medidas están siendo llevadas a cabo sin una sola palabra de desaprobación por parte del gobierno rumano.”
Artículo publicado en la prensa inglesa en el que se expone con sarcasmo la entrada de la Wehrmacht en Rumania. "Los alemanes marchan al interior de Rumanía... para comer."
Al mismo tiempo, el Enviado de Gran Bretaña en Bucarest, sir Reginald Hoare. ha presentado al mediodía de hoy una nota en la que ha solicitado la entrega de su pasaporte. Hoare espera poder salir del país con todo su personal, compuesto de 50 miembros, en el primer barco disponible. Al mismo tiempo se ha invitado a todos los ciudadanos de Gran Bretaña residentes en el país a hacer lo propio.
Artillería antiaérea alemana en los pozos petrolíferos de Ploesti.
Desconocemos si esta maniobra diplomática es la antesala de una acción militar británica contra Rumanía, pero tampoco está de más repetir algunas de las palabras que pronunció el Führer durante su último discurso: “Todo lo que pueda suceder en esta guerra está previsto por nosotros. Nada será una sorpresa para Alemania."
Desfile militar de la Wehrmacht en Bucarest.
La realidad es mucho peor de lo que los británicos puedan sospechar. Estos días se ha publicado en el Reich una revista de aeronáutica en la que se reproducen fotografías de la defensa antiaérea y de otros servicios de aviación organizados en torno a los pozos petrolíferos de Rumanía por la Luftwaffe. Pero esto no es nada en comparación con los 40 trenes de tropas que cruzan Hungría diariamente en dirección a Rumanía, donde el Führer está desplegando un formidable ejército de 600.000 soldados, y todavía menos en comparación con el siguiente movimiento que la Wehrmacht pretende dar en virtud a un acuerdo secreto firmado hace cuatro días: establecerse en Bulgaria. En efecto, cuando el hielo sobre el Danubio se rompa, los ingenieros de la Wehrmacht procederán a tender puentes de pontones flotantes. A cambio, el Reich ha prometido a Bulgaria acceder a sus aspiraciones territoriales sobre Grecia y obtener acceso al Mar Egeo.
Tren cargado de tropas alemanas rueda en dirección a Rumanía.
Mediante estas maniobras hacia el corazón de los Balcanes, nuestro Führer asegura para el Reich una posición favorable de cara a la intervención británica en Grecia y al auxilio de las tropas italianas en Albania al tiempo que consigue unificar, desde el Mar Báltico hasta el Mar Negro, un frente común contra la Unión Soviética.
Es lebe Deutschland!