Sin temor a equivocarme: cada vez que la prensa trata el asunto masónico, mete la pata. Con la cantidad de amigos masones y gargantas profundas masónicas de guardia que tienen los periodistas, no me explico por qué no se documentan y asesoran antes de publicar.
Botones de muestra:
En elconfidencialdigital se hacen eco de la presunta postulación de “varias mujeres” a la candidatura de Gran Maestro/a de la Gran Logia Simbólica Española, lo que el medio califica como “novedad”. De haberse asesorado y contrastado antes, hubieran sabido que, de novedad, nanay: ahí está, por ejemplo, la Gran Logia Femenina de España, para cuya Gran Maestría no dejan de postularse mujeres, desde su nacimiento en nuestro país. Ahí está, de igual modo, la Federación Española del Derecho Humano, tres cuartos de lo mismo. Igualmente, en la Gran Logia Simbólica Española ya hubo una Gran Maestra. Nada novedoso.
En la versión digital del diario Huelva Información, al referirse a los cursos de verano en La Rábida, nos encajan dos perlas de pesada digestión:
En primer lugar, se refieren a Ascensión Tejerina –actualmente presidenta en funciones de su Taller- como “la presidenta de los masones en España”, dando la impresión de que todos los masones españoles formamos parte de la misma asociación, federación, Obediencia, cosa… Algo, como sabemos, que está muy lejos de ser así. Tejerina fue, hace años, Gran Maestra de su Obediencia, pero no tuvo mando en plaza en toda la masonería española.
Por otra parte –aquí se me abrieron las carnes, se me erizó el vello y entré en estado de shock-, asegura el diario onubense que, durante uno de estos cursos de verano, “se va a llevar a cabo el rito de iniciación de un masón”. Pienso que el periodista se habrá equivocado, habrá metido la pata, no sabrá de la misa la media. Porque una iniciación es algo íntimo, que realiza la Logia en su Templo y en su Oriente, y, por supuesto, a cubierto, esto es, al abrigo de miradas profanas. Ahora bien, si el periodista no se ha equivocado, ¿se tratará, no de una iniciación, sino de un amago o explicación del rito (algo, por otra parte, deplorable, dado el juramento o promesa de no revelar lo que sucede en Logia)? Impensable e intolerable, de todo punto. El periodista tendrá que rectificar, o ser denunciado por los afectados.
Resumiendo: las relaciones Prensa-Masonería suelen ser habitualmente escatológicas -no siempre por responsabilidad de la prensa-, en la segunda acepción del término en el DRAE.
¡Salud!