Seguimos desgranando nuestra carta de presentación para hacer de este documento algo seguro y perfecto para que podamos conseguir ese trabajo que siempre hemos soñado. Como decimos siempre en nuestro blog, es importante que la carta de presentación cuente con unos cánones que nos permitan no diferenciarnos de forma negativa del resto y si hacerlo de forma positiva. Lo mismo ocurre con el inicio de la carta de presentación, este ha de ser formal y efectivo para atraer la atención del empleador de forma positiva.
Antes de comenzar nuestra carta de presentación y tras haber realizado la investigación previa, hay que presentarse al lector, en este caso la persona que quiere contratarnos. En el caso de que nos equivoquemos en el destinatario de la carta, todo el trabajo realizado no servirá de nada. Hay que asegurarnos de que la persona a la que va dirigida la carta es la correcta. Para conocer el nombre de la persona a la que va dirigida la carta hay que ver el anuncio donde aparecía la vacante. En este anuncio seguro que aparece el nombre de la persona que se encargará del proceso de selección.
En el caso de que no apareciera el nombre o que fuera una candidatura espontánea, no sabrás a la persona a la que va dirigida la carta y tienes que empezar esta carta con un encabezado estándar. Bien dirigiéndote al director del departamento al que depende el puesto al que vas a aplicar, por ejemplo “al director de marketing”. También puedes dirigir tu carta de presentación al director de Recursos Humanos que es el que suele encargarse de la selección de personal dentro de las empresas.
Una vez conocido a quién va dirigida la carta, es importante que expreses ambos géneros, por ejemplo “Al señor/a” si no conoces nada de la persona a la que va dirigida la carta. Si conoces que es un hombre puedes poner el género, lo mismo si es una mujer.