Reflejos
Desde el momento mismo en que nacemos, nuestro bienestar depende de respuestas automáticas, voluntarias o no, a determinados estímulos que debemos resolver.
Por ejemplo, un recién nacido responde al reflejo de succión, cuando recibe el pezón en la boca. Si a ese mismo bebe le pones un dedo entre sus manos, su primera reacción será apretar y sostener. Esto se conoce como un reflejo incondicionado pues es innato e instintivo y es parte del patrón evolutivo. Así mismo, aunque nunca te hayas quemado, tu primera reacción al tocar el calor, será quitar la mano en forma automática.
Entonces, los reflejos son respuestas naturales del sistema nervioso, heredadas de nuestra evolución y que portamos desde antes de nacer.
Ahora bien, si posas para una foto, estarás atento a no pestañar, eso es un reflejo. Así mismo para un conductor de un automóvil, la respuesta al ver la luz en rojo, será frenar. Pero estas no son reacciones naturales pues fueron asimiladas a partir de experiencias.
A estas respuestas espontáneas aprendidas como consecuencia de haber experimentado la asociación entre un estímulo natural (innato) y otro artificial (enseñado), para poder obtener una respuesta igual o mejor, le llamamos reflejo condicionado. Dicho de otra forma, los reflejos condicionados, se adquieren recibiendo un estímulo artificial (luz roja) que provoca una respuesta natural (frenar), generando el resultado esperado (no producir un accidente).
En resumen, los reflejos incondicionados que son naturales, innatos, estables y necesarios, heredados de nuestra evolución, son respuestas del sistema nervioso. Los reflejos condicionados dependen de como nosotros los establezcamos. O sea, son adquiridos, pueden ser temporales u ocasionales, son modificables y dependen de cada uno individualmente. Además son activados a partir de nuestras experiencias almacenadas en nuestro subconsciente.
Nuestras acciones
Entendiendo esto, quizás ahora podamos relacionar algunos comportamientos espontáneos, impredecibles y nocivos en relación con nuestro bienestar. Te podrías identificar con resistencia para iniciar metas y llevarlas a cabo, con infelicidad o inconformidad con los resultados alcanzados, quizás insatisfacción o ausencia de objetivos claros, estar ofreciendo escusas o culpando a otros en vez de comprometernos. En fin, un sin número de derivaciones que podríamos revisar.
Posiblemente podamos culpar en parte a la sociedad y por derivación a nuestros padres, de quiénes y cómo somos. Pero eso no nos exime de ser los únicos responsables de nuestras acciones, ya sean conscientes o no.
Los reflejos condicionados son muy importantes en la práctica de algunas disciplinas de interacción, como las artes marciales o la música. Este condicionamiento constituye una base fundamental del aprendizaje y lo que busca es perfeccionar la técnica.
El cerebro contribuye a que los reflejos sean uniformes y coordinados según los aprendamos y reforcemos, pero también es testarudo y procura olvidar todo lo que sea irrelevante, conservando solo lo necesario para no estar aprendiendo permanentemente.
Cuando logramos aprender a reaccionar correctamente y para que estos sean verdaderamente útiles y efectivos, debe existir emotividad y práctica, ya que existe una estrecha relación entre memoria y emoción. Siendo esta última la que hace los recuerdos perdurables, los que debemos reforzar para garantizar que estos persistan en el tiempo. Si el estímulo no se refuerza o ejercita, el reflejo condicionado terminará por debilitarse y desaparecer. No lo olvide.
Sin embargo, ten presente siempre que estamos aprendiendo y reforzando, por lo que debes ajustar constantemente tus experiencias enfocándolas en como deseas reaccionar. Nuestra especie es perfecta, pero nuestra capacidad de reacción debe evolucionar.
Conclusión
Para decirlo en forma sencilla, un reflejo condicionado es un acto o reacción que a través de la costumbre de asimilación, se convierte en rutina y luego lo hacemos sin pensar.
Dicho lo anterior, ahora tenemos una interpretación de porque algunas veces actuamos de determinada manera, realizando acciones incoherentes y resultados equivocados.
Así es que no se trata de aprender solamente. Para sacar provecho de nuestro cerebro y lograr reflejos deseados, es necesario canalizarlos de forma progresiva mediante el sistema de estímulo-respuesta, para lograr adquirir el reflejo condicionado correcto.
Toda nuestras acciones, de una u otra forma, están relacionadas con nuestros reflejos condicionados, así que nuestras acciones dependen de nuestro actuar y deben ser ejercitadas y modificadas buscando perfeccionarlas. Se constante entrenando las acciones hacia dónde quieres llegar y que persona deseas ser. No hay escusas – persevera y vencerás.