¿Insultos racistas a Adebayor?

La UEFA ha anunciado que está investigando al Inter de Milán “por conducta racista” después de que sus aficionados profirieran insultos racistas al delantero del Tottenham Emmanuel Adebayor durante el partido de vuelta de octavos de final de Europa League disputado el pasado jueves en el Giuseppe Meazza.

La noticia me sorprende, y me produce nuevamente la sensación esa del dicho popular sobre cogersela con papel de fumar. La UEFA, que no tengo muy claro a qué se dedica, investiga a un club por insultos racistas, algo que empezó, quiero recordar, cuando Eto’o se sintió ofendido por un comentario relativo al color de su piel. Vivimos en un país en el que cada domingo, y últimamente cada martes, cada jueves o cada sábado, miles de aficionados en los estadios, se cagan en la madre que parió al colegiado de turno, a quien tildan de hijo de la gran puta hacia arriba, a voz en cuello. Los jueces de línea no pocas veces tiene que escuchar comentarios relativos a su familia generalmente vía materna, sino que en numerosas ocasiones precisan hacer malabarismos para escapar de alguna moneda o botellín, aunque sea de plástico, lanzado al terreno de juego. Pero, no se investiga nada; la verdad es que tampoco haría falta, porque el sujeto, los miles de ellos, se identifican perfectamente con las estupendas imágenes que ofrece la televisión en alta resolución. Ahora bien, lo que parece que inexcusablemente ha de estudiarse, es la falta de respeto a un jugador profesional, que se embolsa varios millones de euros año año por propinar patadas a un balón con más o menos acierto, relativa al color de su piel. Llamar negro a Eto’o, que lo es, tiene investigación y castigo, aunque el hombre de color perciba por correr sobre el césped una cantidad astronómica, pero vociferar sobre lo casquivana que es la madre del árbitro, no merece siquiera una reprobación pública. Se conoce que forma parte del juego: El juez de la contienda no puede tener sentimientos, pero el mimado astro del balompie disminuye de forma alarmante su rendimiento si los comentarios del público más cercano tienen contenido racista. Ustedes perdonen, pero ¡hay que joderse!.