El artículo presenta las tendencias actuales en inteligencia artificial en el campo sanitario: 1. Una de las más importantes es la identificación del riesgo de padecer una patología concreta y plantear opciones de tratamiento, como en este estudio sobre cáncer colorrectal o este sobre predicción del riesgo cardiovascular. 2. Otro tipo de estudios se centra en la reducción de complicaciones. Existen artículos centrados en la predicción de complicaciones como neumonía en pacientes con heridas en conflictos armados y también otros para pacientes con diabetes tipo 2 (complicaciones como neuropatía, por ejemplo). 3. También hay estudios y experiencias centradas en la mejora de los cuidados al paciente, sobre todo como ayuda a la toma de decisiones, por ejemplo en métodos de diagnóstico por imagen como la resonancia o con datos clínicos para la observación de problemas neurológicos en el diagnóstico de ictus.4. Finalmente, otro campo de trabajo tiene que ver con la investigación clínica y con el desarrollo de nuevos medicamentos. Finalmente, los autores del artículo plantean algunos riesgos del uso de la inteligencia artificial, tanto desde la perspectiva del uso de algoritmos como con la asistencia robotizada. Factores como la reducción del contacto humano, el hecho de resumir un paciente y sus circunstancias a un conjunto de datos clínicos, la pérdida de control por parte del profesional o la pérdida de privacidad. Otro aspecto importante es el efecto que va a tener en las funciones y futuro profesional de muchos profesionales sanitarios: si ahora se empieza a trabajar con algoritmos, ¿llegará el día en que los algoritmos sustituyan al profesional? Aunque parezca que todo esto de la inteligencia artificial todavía se usa en entornos de investigación, cada vez son más las empresas que lanzan productos al mercado basados en algoritmos y con técnicas de machine learning incorporadas. Por ejemplo, viz.ai presenta una solución para mejorar la detección del ictus en los pacientes, Arterys está más enfocada a la detección basada en imágenes, al igual que el software de aidoc.
Por ahora, los algoritmos no son perfectos pero poco a poco su nivel de error está alcanzando el error humano. Son muy habituales los ejemplos de errores diagnósticos de algoritmos pero el uso de técnicas de machine learning está ayudando a que dichos errores se reduzcan. No obstante, el futuro está por escribir, y al final lo único que tenemos ante nosotros son herramientas de ayuda con el único objetivo de mejorar la asistencia al paciente.