
Christopher Nolan vuelve al ruedo tras dos años para sumergirnos en una odisea visual de las que fascinan y de las que además dan que hablar. Su cine viene dividiendo aguas, y esta no es la excepción, incluso es factible que se trate de su obra más compleja y audaz. Interstellarpara muchos representa una pericia impresionante e inolvidable; para otros (probablemente los que se agrupen en la minoría), una cinta discutible. Dentro de este último bando, existen quienes se jactan de que el director apela a un lenguaje demasiado científico, acusándolo de rebuscado. Si bien es cierto que en determinados pasajes da la sensación de que cuesta un poco asimilar tanta información, es atinado remarcar que este modo de presentar los acontecimientos, con sus explicaciones y con todo lo que concierna a la teoría cuántica, es el más serio y correcto para enfocar el tipo de cuestiones que el relato aborda. Lo que los hermanos Nolanexhiben en pantalla suena convincente, creíble, serio y a la vez apasiona. La Tierra está llegando a su fin y se recurre a una arriesgada misión que se encuentra encabezada por el ingeniero-granjero Cooper (Matthew McConaughey) junto a Amelia (Anne Hatthaway), quienes emprenden un viaje hacia más allá de nuestra galaxia con el fin de hallar respuestas que permitan salvar a la humanidad.


LO MEJOR:el modo en que se cuenta la historia. Lo emotivo, el viaje espacial intenso y la experiencia única en la que se sumerge al espectador. La banda sonora. Las actuaciones y la mano de los hermanos Nolan para combinar el cine de autor con una producción enorme.LO PEOR:cuesta un poco acostumbrarse a las primeras explicaciones técnicas.PUNTAJE:10