Ay, no duermes amor
te arrullaría con mis latidos
aunque parezcan chirridos
por ser viejo el corazón
y te desvelen sus ruidos.
Todavía estás despierta
si tuviera valor
te diría que fuiste real
y ahora eres un sueño
porque cuando estás
no te tengo
como antes
intocable presencia.
Me gustan los te quiero
tanto como tus caricias
que aún erizan mi vello
porque todavía te siento.
Tomaré un bus al pasado
me bajaré donde te vi
aquella primera vez
y romperé el billete
para anular el regreso.
(imagen Pixabay)