Es bueno que los niños sepan cómo se hace la comida que toman e incluso que participen en su preparación, pero no siempre tenemos tiempo para mostrar el proceso completo. Aquí van algunos aparatos que reducen la dificultad de la cocina, dejándonos libres para otras cosas y permitiendo a nuestros hijos colaborar en nuevas actividades.
Arrocera
Este es sin duda el invento que más usamos en casa. Es una "3 en 1" que hace arroz, sirve como olla lenta y prepara gachas de avena. Es un alivio poder olvidarse por completo del arroz mientras cocinamos otras cosas. Cuando está hecho, la arrocera baja la temperatura y lo mantiene listo para comer por el tiempo que sea necesario.
Yogurtera
Las hay eléctricas. Estas no valen lo que cuestan. Sin embargo, por menos de diez libras se puede conseguir una que hace un yogur más que decente. A mi hija no le gusta el yogur casero, prefiere el de supermercado pero el artilugio ha servido para que vea cómo se hace y para hacer madalenas y tartas el casero es mejor.
A pesar de lo que dicen las instrucciones, no se necesita comprar cultivos especiales. Con una cucharada sopera de yogur de supermercado tenemos bastante para hacer un litro de yogur natural.
Panificadora
Con lo poco que cuesta el pan y la variedad que hay en los supermercados, la panificadora puede parecer un invento trasnochado. Sin embargo, tiene algunos buenos usos. El principal es que facilita hacer masas más especiales, como la de la
empanada gallega, panes sin gluten, etc. También la de la pizza, que además se puede congelar. Pero quizá el mejor uso para nosotros sea para hacer mermelada. La mermelada de panificadora es menos dulce que la comprada y se puede hacer casi con cualquier fruta. Puede ahorrar bastante dinero en años en los que hay una cosecha especialmente generosa de cualquier fruta o baya.
"Pie maker"
El último artilugio de Lakeland. Hace tartaletas dulces y saladas en diez minutos. Con masa comprada y ayuda para hacer el relleno, un niño puede hacer su propio pastel de carne, tarta de frutas o quiche para comer en el colegio o el parque.