El objetivo de un grupo de estudios llevados a cabo por científicos del Servicio de Investigación Agrícola (ARS) es elaborar galletas con una proporción mayor de harina obtenida a partir de grano entero en vez de usar harina blanca refinada.
Los resultados de los estudios, publicados en la revista científica Crop Science, podrían ayudar a los cultivadores de nuevas variedades de trigo en la identificación de las mejores plantas, que podrían llegar a ser las mejores fuentes de harina de grano entero para utilizar en la elaboración de galletas.
Los estudios confirmaron que mediante dos pruebas relativamente sencillas, no costosas y fácilmente disponibles se puede obtener una indicación preliminar de la utilidad de una nueva variedad de trigo como fuente de harina de grano entero. Las determinaciones fueron la prueba de la sacarosa SRC (capacidad de retención solvente) y la prueba del equivalente de suavidad en la molienda.
Los científicos usaron 14 variedades comerciales distintas de trigo blando para llevar a cabo la investigación. El estudio demostró que los criadores de nuevas variedades y los fabricantes de alimentos pueden usar las pruebas de SRC y del equivalente de suavidad en la molienda para efectuar evaluaciones tempranas. Una vez identificadas las plantas que son fuente superior de harina de grano entero para la elaboración de galletas, se puede utilizar un procedimiento de mayo coste conocido como la prueba de corte de alambre.
Fuente: Innopan