Los desarrolladores de medicamentos y los equipos de investigación han estado buscando curas y nuevas modalidades de tratamiento para el VIH durante más de 40 años, pero están limitados por su comprensión de cómo el virus establece la infección en el cuerpo humano . ¿Cómo este virus pequeño y sin pretensiones con solo 12 proteínas, y un genoma de solo un tercio del tamaño del SARS-CoV-2, secuestra las células del cuerpo para replicarse y propagarse a través de los sistemas?
Un equipo interdisciplinario de Northwestern buscó responder esa pregunta, utilizando un nuevo enfoque de edición de genes CRISPR para identificar genes humanos que eran importantes para la infección por VIH en la sangre, encontrando 86 genes que pueden desempeñar un papel en la forma en que el VIH se replica y causa enfermedades, incluidos más de 40 que nunca se han analizado en el contexto de la infección por el VIH.
Hasta ahora, los estudios se han basado en el uso de células cancerosas humanas inmortalizadas (como las células HeLa) como modelos para estudiar cómo se replica el VIH en el laboratorio. Si bien estas células son fáciles de manipular en el laboratorio, son modelos imperfectos de células sanguíneas humanas. Además, la mayoría de estos estudios usan tecnología para rechazar la expresión de ciertos genes, pero no los desactiva por completo como con CRISPR, lo que significa que los científicos no siempre pueden determinar claramente si un gen estuvo involucrado en ayudar o suprimir la replicación viral.
En el estudio, las células T, el tipo de célula principal al que se dirige el VIH, se aislaron de sangre humana donada y se eliminaron cientos de genes mediante la edición de genes CRISPR-Cas9. A continuación, las células "knock-out" se infectaron con VIH y se analizaron. Las células que perdieron un gen importante para la replicación viral mostraron una disminución de la infección, mientras que las células que perdieron un factor antiviral mostraron un aumento de la infección.
A partir de ahí, el equipo validó los factores identificados eliminándolos selectivamente en nuevos donantes, donde encontraron una ruptura casi uniforme de las vías recién descubiertas y las bien investigadas.
El equipo está entusiasmado con el desarrollo adicional de esta tecnología para permitir la detección de todo el genoma en la que eliminan o activan de forma independiente cada gen en el genoma humano para identificar todos los posibles factores del huésped del VIH. Estos datos representarían una pieza crítica en el rompecabezas, que los acercaría aún más a las estrategias curativas.
El nuevo estudio, fue publicado en la revista Nature Communications.