Revista Televisión
Tengo que reconocer que el programa Invisibles que anoche estrenó Antena 3 me ha sorprendido. No tenia muy claro cual era el objetivo concreto del programa, que tenia mas pinta de seguir a los famosos en sus peripecias (por muy chungas que sean) que de querer mostrar la realidad social de la gente que vive en la calle. Pero no, poniendo siempre al famoso en el centro, pero también poniéndolo como excusa, el programa se molesta en intentar mostrarnos una realidad, de una forma particular y grabada por una cámara, pero eso no hace que sea una realidad menos jodida.
Si superas la situación violenta del primer momento y eres capaz de dejar de preguntarte como pueden grabar el programa sin interferir mucho en la experiencia, el programa me gustó. Incluso hizo algo mejor, me entretuvo, que como siempre digo es lo mas importante cuando te pones delante del televisor para ver lo que sea.
Los personajes famosos que se han prestado a este “experimento” son de lo mas variado, como sus reacciones ante las distintas situaciones ante las que se encuentran.
Pero quizás lo que mas me llegó fue la aparente inocencia de Blanca Fernández Ochoa, que estando supuestamente en la calle se fía de todo el mundo, algo que solo le dura una noche, por que aprende enseguida que buscar compañía en la calle implica algo mas que no dormir sola.
Lo que me pareció mas raro fue que Álvaro de Marichalar se ha tomado el programa como su fuese su propio Callejeros, parecía estar haciendo su propio reportaje con los sin techo, algo que creo cambiara en los sucesivos programas.
Confesare que por mi desconocimiento del formato, que ya había emitido la BBC, creía que solo se trataba de un par de programas y punto. Por eso me ha sorprendido encontrarme con algo parecido al Pekin Express de la indigencia, en vez de buscarse la vida para comer y dormir en China tienen que hacerlo viviendo en la calle en Madrid.
En fin, la conclusión es que me ha gustado, y si la cosa dura (ya sabéis como es esto), seguiré el programa con interés. Esperemos que si funciona no intenten alargarlo innecesariamente y acaben siendo pesados, por que no seria un tema ligero precisamente.
Si superas la situación violenta del primer momento y eres capaz de dejar de preguntarte como pueden grabar el programa sin interferir mucho en la experiencia, el programa me gustó. Incluso hizo algo mejor, me entretuvo, que como siempre digo es lo mas importante cuando te pones delante del televisor para ver lo que sea.
Los personajes famosos que se han prestado a este “experimento” son de lo mas variado, como sus reacciones ante las distintas situaciones ante las que se encuentran.
Pero quizás lo que mas me llegó fue la aparente inocencia de Blanca Fernández Ochoa, que estando supuestamente en la calle se fía de todo el mundo, algo que solo le dura una noche, por que aprende enseguida que buscar compañía en la calle implica algo mas que no dormir sola.
Lo que me pareció mas raro fue que Álvaro de Marichalar se ha tomado el programa como su fuese su propio Callejeros, parecía estar haciendo su propio reportaje con los sin techo, algo que creo cambiara en los sucesivos programas.
Confesare que por mi desconocimiento del formato, que ya había emitido la BBC, creía que solo se trataba de un par de programas y punto. Por eso me ha sorprendido encontrarme con algo parecido al Pekin Express de la indigencia, en vez de buscarse la vida para comer y dormir en China tienen que hacerlo viviendo en la calle en Madrid.
En fin, la conclusión es que me ha gustado, y si la cosa dura (ya sabéis como es esto), seguiré el programa con interés. Esperemos que si funciona no intenten alargarlo innecesariamente y acaben siendo pesados, por que no seria un tema ligero precisamente.