Ir en bici es bueno, incluso en ciudades contaminadas

Caminar o ir en bicicleta por la ciudad es positivo. Incluso en ciudades con niveles altos de contaminación, los beneficios son superiores a los perjuicios de inhalar aire contaminado de forma continuada. Es la principal conclusión de un estudio realizado por el Centro para la Investigación de la Dieta y la Actividad, y la Unidad de Epidemiología del Consejo de Investigación médica de la Universidad de Cambridge.

El estudio nace ante la necesidad de obtener conclusiones sobre la realización de una vida activa en ambientes contaminados. Sin ir más lejos, Madrid ha sufrido este año varios cortes de tráfico en el centro de la ciudad, debido a los altos niveles de contaminación. ¿Es bueno salir con la bicicleta o a tener una vida activa con esos niveles de contaminación? Las conclusiones del estudio son claras. Las consecuencias positivas de ir en bicicleta por la ciudad son superiores a las negativas de hacerlo en un ambiente contaminado. Todo ello, a pesar de que es uno de los factores de riesgo más importantes para la salud de las personas. Puede parecer exagerado, pero lo cierto es que hay informes que aportan cifras sobre esta problemática. Cifras tan contundentes como que de la contaminación se derivan cerca de 40.000 muertes prematuras al año en el Reino Unido, según un estudio del Colegio de Médicos, Pediatría y Salud Infantil del país.

Beneficioso, incluso, en ciudades con alta contaminación

Hasta ahora, los informes que se habían realizado habían estudiado la idoneidad de realizar desplazamientos activos, es decir, andando o en bicicleta, en ciudades con unos niveles de contaminación normales. Sin embargo, quedaba por analizar cuál sería el efecto en ciudades con unos niveles de contaminación mayores que la media.

La importancia de este último estudio radica en que el análisis es mucho más amplio. A través de simulaciones realizadas por ordenador, se ha conseguido comparar riesgos y beneficios de la actividad, teniendo en cuenta la intensidad de ésta, y el nivel de contaminación.

Tan sólo en un 1% de las ciudades analizadas los riesgos eran superiores a los beneficios de la actividad deportiva en sí. Más concretamente, el estudio se ha centrado en comparar riesgos y beneficios tras media hora de bicicleta al día. Y, en 1% de las ciudades, el riesgo es mayor que la parte positiva de realizar deporte durante ese periodo de tiempo.

Incluso en Delhi, es beneficioso ir en bici

Londres es la capital del Reino Unido. A causa de la contaminación, ya se decidió hace años limitar el acceso de vehículos al centro de la ciudad. De hecho, aquellos coches que lo hacen, tienen pagar una alta cantidad por transitar por estas zonas. Una especie de impuesto o cargo para intentar descongestionar el centro de la ciudad. Pues bien, Delhi sufre actualmente diez veces más contaminación que Londres, lo que da pista sobre el alto nivel de polución que existe ahora mismo en esa ciudad.

El informe concluye que, incluso en esos niveles de toxicidad, es positivo desplazarse con bicicleta de forma activa. Más positivo que el efecto perjudicial de inhalar el aire contaminado. En concreto, según el director del estudio, Marko Tainio, epidemiólogo de la Universidad de Cambridge, necesitaríamos estar más de cinco horas a la semana sobre la bicicleta para concluir que los riesgos de la contaminación son mayores que los beneficios generados por esa actividad física, en Delhi.

Dicho esto, el propio autor del informe recuerda que nos estamos refiriendo a una actividad física moderada. Reconoce que, en estos ambientes tan cargados, un mensajero que trabaje con su bicicleta durante muchas horas al día, sí que se está exponiendo a sufrir problemas de salud, pues los niveles de contaminación en Delhi son realmente elevados.

Por último, también ponen en valor que los efectos están relacionados con la forma física de la persona. En este caso, las conclusiones sobre los efectos positivos y negativos de montar en bicicleta en ambientes contaminados toman como referencia a una persona con una condición física media. Sin embargo, se desconoce el efecto exacto que podría tener en personas con obesidad o con otro tipo de limitaciones cardíacas, respiratorias o de salud en general.