Iron Man se combina con Thanos en una nueva imagen entre bastidores de Avengers: Infinity War

Avengers: Infinity War es ahora oficialmente el éxito comercial mayor parte de los últimos tres años, además de la cuarta película en el mundo que han superado el umbral de $ 2 mil millones, pero el superhéroe de los Hermanos saga Russo sigue siendo hablado a través una nueva y bella imagen del backstage.

Para ser precisos, la foto en cuestión fue emitido directamente por Marvel Studios y muestra a Robert Downey Jr. y Josh Brolin en su papel de Iron Man y Thanos, los granos villano que nuestros héroes también volverán a cara en la muy esperada cuarta capítulo de la franquicia, que saldrá el próximo año.

En la imagen vemos a los dos actores perfectamente vestidos con trajes de captura de rendimiento, uno para ciertas piezas de la armadura de Iron Man, y el otro para dar vida al colosal Titano Folle, creado completamente usando la técnica de captura de movimientos y expresiones faciales y gráficos por computadora. Pero entre los puntos en la cara y el equipo incómodo, es bueno tener en cuenta que nuestros queridos no pierden la sonrisa y el deseo de trabajar y divertirse, tanto para mirar la habitación y sonreír por esta maravillosa imagen.

Avengers: Infinity War, the Review: el Universo Marvel en su mejor momento

La muerte viene para todos. Es “un nivel”, dijo el mítico Totò, que no deja escapar a nadie. Es imparcial y absoluto, misterioso, eterno. La némesis de la vida, su opuesto exacto, su ausencia. Y los griegos lo veneraban, personificándolo en Thanatos, oponiéndolo a Eros, amor, el fuego de la existencia. Entidades opuestas, incapaces de vivir juntas, vida y muerte: la primera luz y la esperanza, la segunda oscuridad y la desesperación. Ambos son necesarios, solo uno cierto. Pero su venida puede ser reverenciada, anhelada, buscada; puede ser la salvación del dolor, del sufrimiento. Grito de alegría, alivio de la adversidad del enemigo jurado. Es una diosa sinuosa y despiadada con la que tarde o temprano todo se encuentra con el ojo, luego bájalo como un signo de respeto, siguiéndolo a lo largo de lo desconocido. Y los Estudios Marvel, a su manera, han intentado advertirnos, desde el primer e histórico Vengador: la muerte está por llegar. Thanos viene, fiel servidor de la Diosa, brazo derecho del destino, loco, majestuoso, despiadado.
La espera fue larga, seis años, pero al final nos: Vengadores Guerra del Infinito ha venido a destruir toda certeza que teníamos Universo Marvel cinematográfico, temblores, afeitarlo y mostrando los escombros que pensábamos imposibles de ver. La Guerra del Infinito ha venido a recordarnos que la muerte siempre anhela la cosecha sembrada por la vida, lo que en el mundo de la Casa de las Ideas significa liberar a su poderoso, feroz y herido Titán.

El paradigma de Némesis

La importancia de este tercer crossover dirigido por los hermanos Russo es absolutamente única. No sólo alcanza a diez años desde el comienzo de esa gran y cohesionada proyecto que ahora la palabra MCU, pero finalmente se centra en uno de los villanos más grandes que la historia de recuerdos cómicos, Jim Starlin Thanos, la contraparte Darkeseid DC Kirby’s, el villano que todos los fanáticos de Marvel necesitaban y que se merecían. Durante años, de hecho, la compañía dirigida por Kevin Feige ha intentado en vano lanzar en la pantalla grande a un enemigo que podría impresionarse en las mentes de los fanáticos, fuerte de una motivación válida, de fuerte sensibilidad e inteligencia filosófica. En resumen, un personaje con el que el público podría empatizar de alguna manera. Quizás el Kingpin de Vincent D’Onofrio en Daredevil fue capaz de dar parte a emociones profundas en el espectador, pero todavía se habla de una némesis desarrollada para TV, que desafortunadamente o afortunadamente nada tiene y tendrá que ver con el Universo película. En Infinity War, sin embargo, la mediocridad general de la habitación némesis finalmente se trasciende, por lo que el tan comentado Titano Folle es el verdadero protagonista de la cinemática, exactamente como nos habían prometido los directores. En la película brilla brillantemente su intimidad, su fuerza, su alma, su conocimiento, su historia. Un concentrado de orgullo y terquedad decidido a llevar a cabo su intención, lo que considera correcto para todo el Universo, su motivo, su inspiración. La historia de Thanos fue diseñada por Starlin para moverse, de intensidad arcaica, para dar humanidad y contenido a un personaje que desde el principio y hasta el final seguirá siendo un cruel opresor, un asesino y un genocidio.
No se puede tomar partido por él, absolutamente impensable justificarlo, sin embargo, una comprensión de la moto encontrará su camino en su corazón, porque detrás de esa piel gruesa y enfermo púrpura no sólo se esconde el alma de un tirano, sino también el corazón de uno de los padres y un personaje dispuesto a hacer cualquier cosa para mantener la fe con sus ideales. Y la captura de la interpretación ha dado pasos tecnológicos ahora inimaginables, lo que permite realizar la interpretación de Josh Brolin absolutamente vivo, emocionante y real: su rostro brilla, brilla a través de todos sus movimientos. Thanos es Brolin y es un villano excepcional: lo entenderás en la apertura, lo admirarás mientras tanto y te encantará al final.