Italia, Suiza y Austria han prohibido la venta de vacunas contra la gripe de la compañía farmacéutica suiza Novartis. Pueden existir problemas de seguridad en las mismas… que se suman a su manifiesta inutilidad.
El Ministerio de Salud italiano las prohíbe a la espera de las pruebas sobre los posibles efectos secundarios. En el país alpino llevan las marcas de Aggripal, Fluad y Influpozzi. En Suiza, la agencia nacional de medicamentos Swissmedic las retira del mercado debido a las “posibles impurezas” tras encontrarse ciertas manchas blancas en las jeringuillas que contenían este preparado antigripal. Esto me recuerda que la vacuna contra el virus del papiloma humano también ha presentado impurezas” sin que se haya retirado.
Lo peor es que además de peligrosas para la salud las vacunas de la gripe son poco menos que inútiles. El asunto ha merecido una revisión de la prestigiosa Cochrane Library concluyendo sin dudas sobre su falta de eficacia. No obstante se presiona a la población y a los profesionales sanitarios para conseguir una vacunación masiva, como hace el gobierno vasco, véase su campaña de marketing del miedo para impulsar la vacunación contra la gripe. Como la Cochrane Library advierte en otro estudio realizado esta vez en niños menores de dos años:
“In children under the age of two, the efficacy of inactivated vaccine was similar to placebo. Es decir, en niños menores de dos años la eficacia de la vacuna es similar al placebo“.
Los problemas de Novartis se unen a los de la holandesa Crucell, que la semana pasada bloqueó todos sus envíos de vacunas antigripe en Europa por un problema de calidad en sus dosis.