Ayer se disputaron los dos partidos más interesantes de los octavos de final de la Coppa de Italia. Por un lado, la Sampdoria empató a dos con el Udinese y pasó a cuartos gracias a los penalties, y por el otro, teníamos un derby romano. Para mí, el duelo entre vecinos con más colorido en las gradas del Viejo Continente, a pesar de todo lo que lo rodeó.
