Izquierda islamica.

El sábado 28 se celebraron manifestaciones en varias capitales españolas en contra de los planes del gobierno francés para acabar con el Estado Islámico, en especial contra la guerra. La mayor de todas ellas fue la de Barcelona con unos 3.000 asistentes.

Es curioso que en Francia las encuestas indican que el 80 % de los franceses apoyan las medidas de Hollande, pero Spain is different, y la izquierda radical y paraislámica  todavía es más different.

Procuré ver el máximo de fotos distintas de la manifestación a través de las webs de periódicos y otras y conseguí ver 17, y de todas ellas solo en dos había un pequeño letrero condenando los ataques terroristas de Paris, mientras en todas ellas aparecían grandes carteles contra la islamofobia y la guerra, y nada menos que 3 carteles proclamaban de distintas formas que el Islam es una religión de paz  y amor. Todos los asistentes que fueron preguntados en TV3 y TVE cargaron muy duramente contra la guerra, la islamofobia y el maltrato al Islam, pero ni uno solo se refirió claramente a los ataques de Paris y sus víctimas más que muy de pasada y en solo un caso.

Aparte que la izquierda radical considera islamofobo a cualquiera que critique a sus grandes amigos del Islam radical aunque sea con la verdad por delante, calificarlo de religión de paz y amor es una inmensa falacia, en ningún caso justificable por la defensa de los musulmanes moderados, que ciertamente no tiene responsabilidad en los ataques, del inmenso cabreo de la ciudadanía europea.

No se puede calificar de religión de paz una creencia en cuya escritura fundamental, el Corán, se menciona varias veces la palabra “matadlos” referida a los infieles, en que se les exige a los musulmanes la implantación del Islam en todo el mundo por las buenas o por las malas, que indica repetidamente que en los territorios bajo la Sharia, la Ley Coránica, los infieles deben convertirse, o pasar a ser ciudadanos de quinta categoría sin más derechos ni propiedades que los que el Islam quiera concederles, y si se oponen a una cosa y la otra deben ser eliminados.

Ciertamente los musulmanes moderados, al menos aparentemente, han superado estas barbaridades de la misma forma que los cristianos hemos superados las barbaridades de la Biblia, ya no lapidamos a las mujeres adulteras, y nos hemos quedado con el mensaje básico y eterno, pero los musulmanes radicales cumplen el Corán al pie de la letra, apoyados por sus grandes amigos, los idiotas de la izquierda radical europea. La frase repetida montones de veces que lo que hace el Estado Islámico no tiene nada que ver con el verdadero Islam es otra falacia, lo que hace el Estado Islámico es seguir las órdenes del Corán al pie de la letra, interpretándolas como lo hacían en la Edad Media.

Hace unos días y gracias a un comentario de Pilar Rahola en el programa de Cuni, me enteré que en el programa de la CUP se incluye que cuando se constituya la República Catalana, esta deberá romper absolutamente todo tipo de vinculo con Israel, no solo no estableciendo relaciones diplomáticas sino cortando toda relación personal, cultural, deportiva o de cualquier clase. Parece ser que no mencionan para nada a Hamas, Estado Islámico, Arabia Saudita, Irán y otros lugares donde no solo se persigue la democracia por considerarla un sistema demoníaco, además se condena y ejecuta a homosexuales, apostatas, mujeres infieles o violadas y otras lindezas, con las que la CUP y la izquierda radical deben estar totalmente de acuerdo.