La persecución franquista a la Orden Masónica (1940). Documento 2ª parte
Adjuntamos la segunda y última parte de la plancha masónica leída en Tenida ordinaria en México, dedicada a la persecución de la Masonería en 1940 por la dictadura franquista. Como dijimos en post anterior esta fue reproducida en la revista Verbum en 1950, editada por el Gran Oriente Federal Argentino (G.ía en 1940 por la dictadura franquista. Como dijimos en post anterior esta fue reproducida en la revista Verbum en 1950, editada por el Gran Oriente Federal Argentino (G.·. O.·. F.·. A.·.)La Plancha sigue de esta manera ...
Decían así: Cinco siglos de la Historiay un pueblo que, en su vibrar,libre en sí, supo encauzarlos destinos de su gloria,deshacen su trayectoriay se anula el siglo veinte.
-"¡Siglo quince, es el vigente!...-pregona inmundo graznido-Y España toda, es un nidode Inquisición renaciente.
Mancebías y cuarteles;sumisión al extranjero;cárceles, "Nobleza" y Clero,y al "paredón" los "infieles".
Leyes sádicas, crueles,que secuestran sin piedadpensamiento y libertaden nombre de un Dios Eterno.Y a esto llaman... "Gobierno"...¡Y asiente la Humanidad!...
¡Pobre España!... -¡Te han vendidocomo al Dios crucificado!...-¿Quién tu sangre ha derramado?...-¿Quién en tu honor te ha ofendido,haciendo del suyo olvido?...-¡Malos hijos te salieron!...-Malos, también, los que fuerontus amigos y rectores!...¡Falsos todos sus amoresque unos y otros te ofrecieron!
"¿A quién, pues, queridos hermanos, ha podido causar extrañeza esta disposición persecutoria contra la Masonería en España?
Siempre los malos temieron a los mejores. ¡Tales son de graves sus pecados!
Y si de nuevo viniese a la tierra el mismo Cristo de Nazaret, otra vez lo crucificaría en aras de inconfesables intereses y egoísmos, esta sociedad de fariseos que se hace llamar "cristiana". Porque el reino de Jesucristo, no era de este mundo, -dicen que decía él en tanto que el reino del fariseísmo no lo es del otro, sino de este, y bien apegadito a este y a este y a todas sus más bajas pasiones y concupiscencias.
·. O.·. F.·. A.·.)
La Plancha sigue de esta manera ...
Decían así: Cinco siglos de la Historiay un pueblo que, en su vibrar,libre en sí, supo encauzarlos destinos de su gloria,deshacen su trayectoriay se anula el siglo veinte.
-"¡Siglo quince, es el vigente!...-pregona inmundo graznido-Y España toda, es un nidode Inquisición renaciente.
Mancebías y cuarteles;sumisión al extranjero;cárceles, "Nobleza" y Clero,y al "paredón" los "infieles".
Leyes sádicas, crueles,que secuestran sin piedadpensamiento y libertaden nombre de un Dios Eterno.Y a esto llaman... "Gobierno"...¡Y asiente la Humanidad!...
¡Pobre España!... -¡Te han vendidocomo al Dios crucificado!...-¿Quién tu sangre ha derramado?...-¿Quién en tu honor te ha ofendido,haciendo del suyo olvido?...-¡Malos hijos te salieron!...-Malos, también, los que fuerontus amigos y rectores!...¡Falsos todos sus amoresque unos y otros te ofrecieron!
"¿A quién, pues, queridos hermanos, ha podido causar extrañeza esta disposición persecutoria contra la Masonería en España?
Siempre los malos temieron a los mejores. ¡Tales son de graves sus pecados!
Y si de nuevo viniese a la tierra el mismo Cristo de Nazaret, otra vez lo crucificaría en aras de inconfesables intereses y egoísmos, esta sociedad de fariseos que se hace llamar "cristiana". Porque el reino de Jesucristo, no era de este mundo, -dicen que decía él en tanto que el reino del fariseísmo no lo es del otro, sino de este, y bien apegadito a este y a este y a todas sus más bajas pasiones y concupiscencias.
Fotografías: © Uwe Walter
Es así entonces que siendo la Masonería una escuela de altas virtudes humanas, un crisol donde se funden y ahogan las extraviadas pasiones del hombre y del cual este sale como concebido en nuevo molde que le diera a su ser estructura y vida espiritual nuevas; como nuevo hombre, ungido por los óleos de la dignidad y de la virtud humanas, es así, pues, decimos que una sociedad y una iglesia donde se predican y practican tan opuestas enseñanzas a las nuestras, han de estimarnos y perseguirnos como a su más irreconciliable enemigo; como si de un nuevo Cristo se tratase.
Es, por lo tanto, la falsa ley que comentamos, una "natural" reacción del mal, contra el bien: del vicio, contra la virtud; de la injusticia contra la justicia; de las tinieblas contra la luz; de la mentira contra la verdad.
Es el triunfo, momentáneo, sí, pero triunfo al fin, de la más abyecta maldad, contra la bondad más humilde y generosa. Es el triunfo del crimen, contra el Derecho...
Expediente del Tribunal Especial para la Represión