Chistes escatológicos, de consumo rápido, y sin pensar mucho. Tampoco tiene más. El hecho del viaje en el tiempo, es una mera anécdota para poder realizar ese tipo de humor ochentero. No existe un hilo argumental, ni nada que se le asemeje, los personajes corren de un lado para otro sin sentido, sueltan su frase, y vuelven a ir a otro lado.
Mi Puntuación: 4.3