Una oportunidad para mil Jamilas
Nacer en la Etiopía rural es un reto, sobrevivir un desafío
Jamila, sobrevivir para poder vivir en la Etiopía rural.
Si naces en Etiopía, primero tienes que sobrevivir al parto, a la primera inspiración, al primer día, semana, mes, luego tan sólo algunos llegan a vivir.
Otros, la mayoría, los nadie, sobreviven cada día buscando una vida que nunca llega.
Es injusto.
Por nacer en Etiopía… Condenada a sobrevivir cada día.
Esta es la historia de Jamila…
Ayúdanos a dar una oportunidad a mil Jamilas
Una oportunidad para mil Jamilas
El 14 de mayo, Jamila empezó a luchar para vivir. Con apenas unas horas de vida, una infección generalizada obligó meterla en una incubadora con soporte de oxígeno en la Unidad de Cuidados Intensivos de bebés del hospital de Gambo, una zona rural al sur de Etiopía.
La primera noche, el estado crítico de Jamila junto un corte de luz -unido a la imposibilidad de asumir el coste de la gasolina del generador del hospital- estuvo a punto de acabar con su vida. Pero Jalima sigue luchando por vivir.
En esta iniciativa te pedimos que nos ayudes a salvar a Jamila y a otros mil bebés como ella. Hace más falta que nunca. Cada día, 480 niños menores de 5 años mueren en Etiopía, la mitad antes de cumplir un mes de vida. El 80% por causas evitables.
Aunque en Gambo hacemos todo lo posible para evitar más muertes, la falta de recursos limita nuestro trabajo. Si nos ayudas a mejorar la unidad neonatal del Hospital Rural de Gambo en Etiopía, lucharemos con todas nuestras fuerzas para dar el mejor tratamiento posible a los recién nacidos.
Con vuestras donaciones, compraremos medicamentos, cilindros de oxígeno y otros materiales indispensables para tratar a bebés. También cubriremos el coste de cursos de formación especializados para trabajadores sanitarios del centro y podremos cubrir el coste de la gasolina del generador y garantizar así un continuo suministro de electricidad para el funcionamiento de las incubadoras.
Muchas gracias por tu ayuda.
El día 14 de Mayo pasado comenzó una historia de lucha y, cómo no decirlo, de esperanza:Tuit de Xavier Aldekoa:
Paso la noche en vela en una maternidad en una zona rural de Etiopía. Las embarazadas llegan en carro o en burro. Durante la noche, bebés prematuros, cesáreas, madres sufriendo y médicos o enfermeros que se dejan la piel. No copan titulares, pero hay mucha gente buena en África”
Nace una niña y el padre, nervioso, me abraza cuando le aseguran que el bebé y la madre están bien. Al cabo de unas horas, las cosas se tuercen. Infección y parada cardíaca. La madre llora cuando los médicos se llevan a la niña. Ahora está estable, pero ha pasado algo:Se ha ido la puta luz. En el 1er mundo eso supone una molestia, aquí que la incubadora donde han metido a Jamila (así se llama la niña) se apague cuando deje de tronar el generador del hospital. No hay dinero para mantenerlo encendido de noche, así que simplemente se apagará.Por cierto, como van desbordados, en la incubadora de al lado han metido a dos bebés juntos. Uno pesa 1’5kg. El otro 1kg 200 gramos. Si no vuelve la luz, los sacarán por la noche y los llevarán con sus madres. Y a cruzar los dedos.
Desespera ver a los médicos bajar la mirada. Si tuvieran un generador pequeño para la unidad de intensivos, podrían dejar las incubadoras encendidas. Pero solo hay un generador para todo el hospital; demasiado caro mantenerlo encendido. “Si no vuelve la luz, lo tendrán difícil”.Jamila no tiene ni 24h de vida y ya tiene que luchar porque es pobre. Contra cortes de luz y falta de medios -dos enfermeras cuidan a 90 niños hoy- y porque no hay gasofa para su incubadora. Etiopía es un país genial, pero aquí los pobres 1º sobreviven; luego quizás viven”
Enlaces
Una oportunidad para mil Jamilas
Jamila, luchando por cumplir las primeras 24 horas de vida, luchando por sobrevivir
Jamila quiere salir de la incubadora
Para Jamila no hay días de fiesta
Retos desde la esperanza
Felicidades Jamila! La Alegría de la madre nos emociona
Jamila junto a su madre, dos supervivientes piel con piel
Y a los 16 días respiró
Jamila empieza a vivir
Su nombre es hoy