Jaque mate a la liga del Barça

Liga sentenciada para el F.C Barcelona y octava liga en los últimos 11 años una hegemonía en toda regla. Con un Messi en este 2019 desatado, y no Suárez de menos a más en la temporada, el conjunto de Valverde se impuso al Atlético de Madrid en los últimos minutos del encuentro, eso sí la expulsión de Diego Costa en la primera parte resultó a la postre decisiva.

El partido empezó con alguna ocasión clara para el Barcelona y con un equipo rojiblanco muy bien posicionado, de hecho el guión inicial era totalmente distinto al esperado, con un Barcelona con menos posición de la habitual y saliendo a la contra. Pero a la media hora del comienzo, dio un giro radical el partido, Diego Costa se dirige al árbitro insultándole (Según el acta arbitral insultos graves y varias veces repetidos), y es expulsado. Con 60 minutos todavía por jugarse, se presagiaba lo peor….

Fue entonces cuando apareció la figura inmensa de Oblak, haciendo paradas de balonmano a una mano, en varias ocasiones, parecía imbatible hoy el esloveno y seguramente mejor portero del mundo hoy día. Simeone entrada ya la segunda parter se la jugó sacando a Morata en lugar de Filipe Luis, con claras intenciones ofensivas. Pero poco a poco el conjunto rojiblanco se fue desgastando, hasta que apareció como en Villarreal hace 4 días, Luis Suárez, restaban sólo 5 minutos para el final del encuentro, cuando el uruguayo conectó un tiro potentísimo y cruzado, al que Oblak no llegó por muy poco, más bien porque le votó justo cuando iba a detenerlo, un gol que vale una liga. Messi hizo más sangre dos minutos más tarde para sentenciar del todo.

Temporada finiquitada para el Atlético de Madrid (a 11 puntos del conjunto de Valverde con tan solo 7 jornadas por disputarse),  el Barcelona en cambio con opciones a hacerse con un nuevo triplete, con algunos jugadores que están yendo de menos a más, como Suarez, Malcom, o incluso Coutinho se le ve más participativo últimamente. Liga que El Barcelona finiquita con mucha autoridad, y que se ha beneficiado de un Madrid en reconstrucción, y un atlético que llegó al Camp Nou habiendo fallado en muchos campos y con una considerable desventaja para un rival como el Barça.