El escritor Javier Menéndez Flores , autor de triunfantes biografías de figuras de la música de España como Joaquín Sabina o bien Extremoduro, retorna a las librerías con Todos Nosotros. Se trata de una novela dura, con instantes en los que la atrocidad está muy presente.
septiembre 2020
Asimismo hay dosis de amor, de ternura y de esperanza. Con esta premisa, Menéndez Flores nos guía por ciertos locales de los más simbólicos de la movida madrileña. No puede haber luz sin oscuridad, el thriller debe ser maniqueo…
«Me planteé escribir un thriller tradicional, una novela de suspense policiaco con un misterio que arranca en la primera página y que se sostiene durante la novela», avanza Menéndez Flores. Hay 2 líneas temporales, la primera en el año ochenta y uno, en plena Transición bajo el gobierno de la UCD, una etapa en la que «no había móviles, ni cámaras de videovigilancia, ni pruebas de ADN y los policías debían encomendarse a su capacidad deductiva y a su perspicacia para hacer de la necesidad una virtud». La segunda línea nos conduce hasta los primeros años de los dos mil, «bajo el gobierno del Partido Popular, ya en Primera División alén de crisis puntuales».
Menéndez Flores habla de los «mágicos 80», un tiempo del que echa en falta «la espontaneidad, las ganas de dar carpetazo al pasado más reciente y la necesidad de buscar el placer y la diversión». « Veníamos de una temporada oscurisima, de prácticamente cuarenta años de dictadura y la gente deseaba sol y divertirse, vivir. » «La corrección política es una forma de pérdida de libertad», agrega el madrileño. « Hay que comprender a la gente cuando habla, quedarse con la esencia de lo que se afirma. Si hay que medir cada una de nuestras palabras e incluso de nuestras sílabas, esto es un planeta de locos. Hay que expresarse con libertad y explicar las ideas. Bastante gente se le llena la boca con la palabra democracia, mas no predica con el ejemplo».
El planeta está repleto de psicópatas… « Eso es palpable», explica el creador. « El thriller debe ser maniqueo, debe haber maldad y bondad». «Hay personas que nacen con determinada tendencia para la delincuencia, mas el ambiente es definitivo», opina Menéndez Flores. « El planeta está repleto de psicópatas, y no todos matan, hay casos extremos que sacan lo peor.
El amor es bastante difícil que engendre monstruos, mas la atrocidad sí». En esta España de los ochenta, Menéndez Flores no evita charlar de tácticas policiales controvertibles, casos de corrupción y mafia policial como fue, por servirnos de un ejemplo, el renombrado Caso Nani.
«Es un elogio al policía con vocación, al que ama su trabajo. Este policía tiene una misión que es divina, superior a él, localizar al responsable de esos actos y esa misión se transforma en la meta de su vida», afirma.
Origen: ‘Todos nosotros’, un thriller violento y ochentero que homenajea a los policías de vocación
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