Entiendo que lo que Jeremy Littau dice ("Chile is a story about journalism’s failure") y lo que recoge de otros acerca del periodismo a propósito del rescate de los mineros chilenos tiene sentido. Pero hay que ver qué razones aduce para decirlo.
La historia del rescate -en efecto- es una "estupenda noticia acerca de la perseverancia, la ingenuidad, el trabajo conjunto y el triunfo". Aunque no sé bien qué trata de referir al mencionar la "ingenuidad", tampoco es momento de discutirlo.
Pero también hay que considerar -desde una perspectiva profesional- el dispendio de medios humanos y técnicos por parte de periódicos y sobre todo televisiones de todo el mundo en la cobertura del feliz evento.
En momentos de crisis económica, de despidos masivos, de cierres, el dispendio y la desproporción es llamativa, a no ser que se trate de lograr el efecto emocional que permite a lectores, oyentes y espectadores quedar atentos en espera de novedades, mientras pasa la publicidad... que financia el dispendio.
Por eso, parece muy acertada la observación de Littau: el público no piensa acerca de los recursos humanos y técnicos (sean muchos o pocos, de alta o baja calidad y valía) que están en juego cuando "consume periodismo". Sólo está atento a lo que tiene delante...
No sé si a esta situación se la puede calificar -como Littau hace- de "journalism's failure". Más que de fracaso, entiendo que antes hay que hablar de posible patología y -sobre todo a propósito del despliegue de la BBC- de toma de decisiones sobre prioridades en inversiones del presupuesto, no sólo en función de la agradecida respuesta del público a la oferta. Porque también hay que considerar -entre otras cosas- los criterios para la planificación del mismo presupuesto de la división de noticias.
via jlittau.netJay Rosen, as usual, beat me to the punch with his thoughts this morning on the Chile mine story. This is why I tweet more than I blog; sometimes you just say it and fill in the gaps later. I did a bit of mini-ranting last night, at least. Anyhow, Rosen:
A big story and a great story, but does 1300 journalists covering the Chilean miners have anything to do with reality?
I’ve been mulling this post for a few days and have wrestled with the cadence. I don’t do the curmudgeon thing very well, but this story has me feeling really, really cranky.
The Chile miners story is a wonderful news story about perserverence, ingenuity, working together, and triumph. That is what most of the world is seeing, and I know a lot of us have been hoping for a safe rescue. But this story depresses me.
I see a story about journalism. To know that 1300 journalists have descended on this mining town to cover a worldwide story is a little disconcerting in an era of closed foreign bureaus and budget cutbacks. Many might question that thought given the intense interest in the story; my Twitter and Facebook feeds were lit up last night as the first miner descended ascended up the 2000-foot shaft. But the public doesn’t think in terms of resources when it consumes journalism; it only has what it has in front of it.
Posted via email from Patologías de la Comunicación