Otro de los guitarristas por los que siempre he tenido una gran empatia. A sido el guitarrista americano Jim Hall. Unos de los más grandes, y menos reconocidos en su trayectoria musical. Con una lista de 35 álbumes grabados como líder se su propia banda. Como músico de sesión o en directo, el a llegado a tocar con Ella Fitzgerald, John Lewis, y Bill Evans entre otros... Su estilo músical se basa en el Post-Bop, y el Jazz. Con una trayectoria de 55 años como músico profesional. Llegando a ser inducido en el salón de la fama del Jazz, en el 1997.
Para esta ocasión invita a un amigo suyo. El trompetista Tom Harrell, el cual pone una sutil melodía impregnando a las canciones de dinamismo, los cuales hacen un gran dúo en lo largo de las 10 temas que componen el disco. Siendo este un disco de Bop con todos su apelativos, con todos sus apelativos. Muy técnico, que en alguna ocasión lo deja algo frio, pero que en algún momento lo aromatizan con un toque latino a la percusión amenizado por Joey Baron. Del disco destaco Bimini, Cross court, o All too soon.