Hablar de Jimmy Smith es hablar de uno de los mejores organistas de jazz de todos los tiempos. Así de simple, es nuestro humilde punto de vista sobre este emblemático músico americano. Nacido en Norristown, en el estado de Pensilvanya en 1928, Jimmy es un niño prodigio con un talento innato para la música, provocado en parte por tradición familiar. Rápidamente se especializa en el uso del órgano, y en particular, en el mundialmente conocido “Órgano Hammond”, allá por el principio de los 50.
Comenzando su carrera con estilos que van desde el rythm and blues al hard bop o el jazz, pronto se hace con un destacado lugar en el ambiente jazzístico neoyorquino. Y allí, en la ciudad de los rascacielos y la capital del jazz, ficha por el histórico sello discográfico Blue Note y posteriormente por Verve, tocando con varios de los músicos más célebres de este género, como los fantásticos guitarristas West Montgomery o Kenny Burrell, los saxofonistas Lou Donalson o Stanley Turrentine y el trompetista Lee Morgan entre otros muchos fundamentales para la década de los 60.
Jimmy Smith, un músico incansable y prolífico donde los haya, explora como todo músico de jazz que se precie, la búsqueda de sonidos y de diferentes estilos. De él, fluye una energía desbordante y se decanta primero por el soul y el funky jazz de los setenta. Con su genial música, influyó a generaciones venideras, donde verdaderamente podemos apreciar éste tipo de música fusión.
Centrándonos en el álbum en directo, Root Down se graba durante su estancia en la costa oeste americana. Las grabaciones se registran un 9 de febrero de 1972 en el “Bombay Bicycle Club”, un pequeño club de Los Ángeles, convirtiéndose meses después en un clásico y vigoroso disco de jazz funk. Producido por Eddie Ray, originalmente contenía 6 temas, añadiéndose en la redición del año 2000 una pista más y otros no editados en su momento.Jimmy Smith (Órgano Hammond), estuvo apoyado en una espectacular banda formada por Arthur Adams (guitarra), Wilton Felder (bajo), Paul Humprey (batería), Buck Clarke (congas y percusión) y Steve Williams (armónica).
El elepé comienza con un movido “Sagg Shotin´His Arrow”, puramente instrumental y con un magistral Arthur Adams a la guitarra, respaldado por un Jimmy Smith demoledor y una grandísima sección rítmica. Inesperadamente giran hacia un bello tema titulado “For Everyone Under the Sun” más bien de estilo soul jazz, alternándose la guitarra y el órgano. A continuación, demuestran su virtuosismo en el estándar de blues “After Hours”, obra del mítico pianista de Alabama Avery Parish.
“Root Down” es la marca que deja huella en el disco. Funky jazz en estado puro, con más de 12 minutos soberbios (en la edición del 2000) y que da el nombre al LP. Lleno de improvisación, wah-wahs, un Jimmy soberbio y una excelente sección rítmica. Esta canción también sirvió mediados los 90 a la reconocida banda de Nueva York “The Beasty Boys “, para incluirla en un disco dónde se situó como uno de sus temas más conocidos.
Una impecable versión del “Let´s Stay Together” de Al Green, anima y hace cómplice al público presente esa noche, con ovaciones sonoras hacia el guitarrista a mitad del tema y por supuesto, también a su terminación. Para finalizar, otro magnífico tema funky de larga duración “Slow Down Sagg”, dónde se refleja la fuerza de éste estilo y la grandeza de unos músicos inolvidables que nos dejaron una actuación para la posteridad.
Concluiremos este análisis con la frase que reza en la parte trasera del disco: “Jimmy Smith forma parte esencial del jazz moderno. En sus primeros años en Nueva York el enfoque veloz de sus dedos define el papel del instrumento con un éxito sin precedentes”.
Ya sobran las palabras.