Todos los parques de atracciones son tremendamente parecidos y aquellos en los que las creencias religiosas o supersticiones son el tema central el escarnio es mayor. Hay que tener en cuenta que en este último caso el negocio es muyo más suculento ya que se necesita de menos presupuesto para montar un parque religioso -ya sea Santiago de Compostela, La Meca, Varanasi, el Muro de las Lamentaciones- que uno hecho por la Warner. Y el dinero reunido es mucho mayor, y digno, ejem.
Todo se ciñe a recitar el mismo sonsonete de dame, dame, dame, porque tú has venido a quí para dar,dar,dar, así que ponte,ponte,ponte, que te voy a dar, a dar, a dar….en fin.
No me enrollo más, simplemente el otro día estuve en Santiago de Compostela, porque el avión despegaba de allí y como había tiempo me di una vuelta por las viejas piedras que sujetan el negocio, y … según iba caminando entre sudorosos mochileros y esquivando mil y una ofertas, me dejé llevar por las primeras impresiones.
JOda a Santiago
Santiago, tu entrada huele a empanada y sudor
Tu joya a incienso ladrón
Eco de mil idiomas
palabras devotas, palabras y botas
Crédulas llagas, pasos desnudos
Engaño masivo y abuso selectivo
Humanidad y humanos
Santos y Jacobos
Listos y bobos
Fervor fanático y dinero fácil
Losas de piedra y claustros de oro
Fonda final y último castigo
Santiago: compost y tela, marinera