En la última reunión del cole, los profesores y la dirección nos comentaron la posibilidad de plantear el próximo curso la jornada intensiva escolar. En la actualidad, como en la mayoría de centros públicos de la Comunidad de Madrid el horario de lunes a viernes es de 9-12:30 y de 14:30-16:00 horas. En los meses de septiembre y junio el horario es intensivo siendo éste de 9 a 13:00 horas.
La idea a mi me gusta, aunque de inicio se han levantado voces críticas que vienen, mayoritariamente, de aquellos padres cuyos hijos se quedan a comedor. Personalmente comprendo a estas familias, conciliar en estos tiempos se ha convertido en una carrera de obstáculos. Pero el centro ha asegurado que aquellos niños que se queden a comedor tendrán la hora de salida como hasta ahora.
Entonces, pensaréis, ¿qué cambia? Pues cambia el horario escolar, la jornada de trabajo y -desde mi punto de vista- el aprovechamiento del tiempo. El horario de tarde se reduce a una hora y media, un tiempo muy escaso para poder ser aprovechado en condiciones, sobre todo después de comer. Entre que suben, se quitan abrigos, se sientan, la profesora organiza y explica la tarea de la tarde, etc, se acabó lo que se daba.
Por el contrario, si tuviesen una jornada continuada creo que el tiempo podría ser mejor aprovechado. En un horario de 9 a 14:00 horas con dos pequeños descansos los niños hilarían mejor sus tareas, aprovecharían mejor el tiempo y comerían a una hora más normal. Aquellos que comen en el colegio se sientan a la mesa pocos minutos después de las 12:30.
Los niños que comen en casa, como Rayo, tendría su jornada escolar más concentrada, comiendo tranquilamente sin la prisa -o pereza- de volver a clase. Por supuesto, por la tarde, a partir de las 16:00 las actividades extra-escolares seguirían estando de la misma manera que ahora.
Entonces, ¿cuál es el inconveniente? ¿Realmente este horario entorpecería la actividad laboral de los padres?, ¿dificultaría de alguna manera la ya difícil conciliación? Para esas familias no cambiaría nada, lo único que cambiaría sería el horario en que sus hijos reciben las clases.
Para las familias que optamos porque nuestros hijos coman en casa, creo que los beneficios son aún mayores, al menos en nuestro caso.
Pero dejando a un lado los beneficios para los adultos, centrémonos en lo que realmente interesa: ¿este horario escolar es más recomendable para los niños? Yo personalmente creo que sí, el tiempo sería mejor aprovechado, por las mañanas los niños rinden mejor, están más concentrados, y no habría parones largos que les desconectara de la actividad del aula.
Son muchos los centros que en Madrid tienen esta jornada intensiva, y me gustaría que me diérais vuestra opinión al respecto. ¿Os gusta la jornada intensiva?, ¿pensáis que es más beneficiosa que el horario partido?