Revista Música
Es difícil clasificar un disco como "Entskidoo". Decir que es experimental, es demasiado obvio. Lo que me llama la atención de este disco es que se convierte de algún modo en el reverso de "Endless Summer", pero colocando los elementos de un modo distinto y donde también hay un elemento pop. Este desorden pop que manejaba Fennesz mirando a los Beach Boys, Joseph Suchy parece que lo maneja como Ian Crause y sus Disco Inferno (banda, amada desde el buen día que la escuché). El ruido es un elemento latente, pero se esconde y aparece en oleadas desbocadas que te dejan sin respiración. Y claro, tampoco es que sea exactamente noise.El caso,es que no hubiera conocido ,probablemente, la existencia de este disco si no es por el magnífico "Soundchambers"(2004) junto a Ekkehard Ehlers y Franz Hautzinger, para el magnífico sello Staubgold. De todos modos, hay momentos que parece que haya cierto espíritu cercano a Durutti Column, pero el desorden vuelve a asaltarte al escuchar percusiones africanas de mbiras o likembes en la tercera toma del disco.La lógica de este disco está completamente pervertida y distorsionada. Esa es la maravillosa maldad pop que me gustaba de Disco Inferno. Dejo claro, que la comparación es a nivel conceptual. Es un disco que te asalta continuamente, cuando parece que estás ante un meditabundo drone o rasgueo de guitarra, te asalta toda la maquinaria. Este hombre, se pudo volver esquizofrénico haciendo este disco, pero recomendable una excursión por esta chaladura del guitarrista de Colonia.El corte final del disco,susurrado por Yvonne Cornelius (Niobe) te pilla a contrapie y te tumba definitivamente.