Ayer hablábamos de una historia de niños y hoy vamos con algo más clásico en relación a las joyas de plata… una historia de amor.
¿Qué pareja no ha empezado su relación con una joya? Sea la que sea… de oro, de plata o de latón, ¡incluso hasta de plástico! Lo importante es el valor que adquiere cuando esa joya entra en nuestras vidas y se hace protagonista de un momento determinado que une a dos personas.
Nos escribe Unai para hacer un regalo de aniversario. Su relación con Itziar comenzó hace un par de años en las playas de Guetaria (Guipúzcoa), a orillas del mar Cantábrico. Entre baño y baño improvisaron unas alianzas de compromiso extraídas de las latas de Coca-Cola… Creo que no son los únicos que han utilizado estas anillas para “sellar su amor”Días después perfeccionaron y personalizaron su joya coloreándolas con rotuladores permanentes y colgándolas en cordones a modo de gargantillas… Original, ¿verdad?
Esa anécdota les ha dado mucho juego durante su relación y todavía les persigue. Itziar siempre guarda la suya en el bolso como quien lleva el objeto con que el realizó un conjuro en Nochevieja y tiene que portarlo todo el año cerca para que la suerte le acompañe.
Ahora Unai quiere sorprenderla con otra joya para que la lleve puesta y no guardada en el bolso. Le hemos recomendado una pulsera de plata como esta… ¿qué os parece?
¿Le gustará a Itziar el regalo de aniversario que Unai le está preparando? Hay que decir que la sorpresa también incluye una cena improvisada en aquella playa, frente al Ratón de Getaria, una de las postales más bonitas y reproducidas de Guipúzcoa… ¡Súper romántico!
Fuente imagen: JLLazkanoDeba
Guetaria tiene unas playas preciosas de aguas tranquilas, ideales para practicar vela y piragüismo. Dicen que fue cuna de Juan Sebastián Elcano, el primer marino español en dar la vuelta al mundo, del que se puede visitar una estatua con su representación. Junto con San Sebastián, Guetaria es una de las villas más antiguas del País Vasco, fundada en 1180 como ciudad medieval por Sancho VI de Navarra… parajes increíbles y lugares históricos, un perfecto escenario para una declaración de amor, ¿no os parece?