Revista Cine

Juego de Asesinos; Duelo de egos

Publicado el 24 mayo 2022 por La Henryteca @LaHenryteca
Por Iria Dominguez.

Joe Carnahan regresa a la gran pantalla a su más puro estilo con "Juego de Asesinos": thriller y acción pulp sobre policías, asesinos a sueldo y juegos tramposos de poder y fe alrededor de decisiones eficaces que construyen setups y payoffs en un entorno muy de serie B.Juego de Asesinos; Duelo de egosJuego de asesinos cuenta la historia de un estafador (Frank Grillo) que, en un intento desesperado de huir de una muerte segura a manos de la mafia, decide provocar su arresto golpeando a una agente de policía novata y decidida (Alexis Louder) en medio de un pequeño pueblo de Nevada. Sin embargo, un segundo arresto, el de un misterioso conductor ebrio (Gerard Butler), desencadenará una violenta tensión entre el joven que busca escondite entre rejas y el asesino a sueldo que ha conseguido plaza en la celda de enfrente.Juego de Asesinos; Duelo de egosEn el plano central de estos tres personajes principales se sitúa Valerie Young, interpretada por Alexis Louder. La agente Young tiene ganas de comerse el mundo con su nueva adquisición: una pistola anticuada que no deja que nadie huela, pero se ve inmersa en una situación tan descabellada como peligrosa. Es un personaje carismático, divertido y muy “badass”, que Louder interpreta a la perfección en todos sus tonos, desde el más desenfadado del inicio al más serio y comprometido del tramo final. No tiene demasiada profundidad psicológica, salvo en momentos breves, pero tampoco se echa en falta. Ella será la pieza central que cada uno de los arrestados intentará poner de su parte. Cuantos más minutos pasan, más protagonista se vuelve y más cómodamente se desenvuelve en su papel.La pareja restante consigue unos resultados igualmente satisfactorios, con un Gerard Butler metido en la piel de otro tipo duro; un asesino hastiado de todo y capaz de cualquier cosa con tal de terminar su trabajo. Astuto, valiente y experimentado, Robert Viddick se presenta como el gato en este juego de persecuciones. El ratón se llama Teddy Muretto y es interpretado por Frank Grillo, que también da bastante de sí en un personaje que podría ofrecer más desde su construcción escrita. En realidad, aunque intenten matarse, la química que se crea entre ellos resulta bastante especial y suficiente para querer ver más de ellos desde que se juntan. Hay que decir que, aunque estos tipos son duros, ninguno llega a la valentía y sangre fría de la agente Young, capaz de reestablecer el código de seguridad de las celdas mientras sufre un tiroteo insaciable.Juego de Asesinos; Duelo de egosEl que más aprovecha su personaje, sin embargo, puede que sea Toby Huss, que utiliza toda su experiencia para sacar el máximo partido a un personaje secundario que, en lugar de resultar irrelevante, consigue dar una vuelta completa a la película pasada la hora de metraje. Su personaje, Anthony Lamb, está tan perturbado y es tan extravagante que contagiará el disfrute de las escenas y los disparos a cualquiera.Sí, la película tiene todo lo necesario para atraer al público y la premisa resulta bastante interesante a oídos de todos (concuerda dentro de la filmografía habitual de Joe Carnahan y se ve hermanada con Ases Calientes, 2007, en su planteamiento), pero la fortaleza de Juego de asesinos es más ese puñado de decisiones narrativas que consiguen crear un look propio y expresivo.Y es que hay muchos recursos narrativos tarantinescos, como el debate que mantienen Viddick y Muretto sobre la definición de “déja-vu” o los pequeños flashbacks cargados de acción y narrados con voz over que explican la situación actual en la que se encuentran los personajes.Juego de Asesinos; Duelo de egos
Eso sí, aunque a mí me haya resultado entretenida en todo momento, hay que decir que el guion parece dividir el estilo de la película en dos partes: la primera hora es un poco más calmada, dando espacio y tiempo a los personajes para desarrollar sus tramas y crear una expectación creciente; los siguiente cuarenta y cinco minutos son los que de verdad vuelan para el espectador. Cortando con la primera parte y dando pie a la segunda, la aparición del personaje de Toby Huss resulta muy refrescante y satisfactoria (una presentación espectacular digna de su excéntrica personalidad). Se dan, entonces, todos los disparos, incendios y explosiones que trataron de contenerse hasta el momento (algo así como el final de Érase una vez en Hollywood (Quentin Tarantino, 2019) y el despilfarre de violencia gratuita que todo el mundo ansiaba).Pero no solo destaca el personaje de Toby Huss, todos me han parecido adecuados en la trama y en el género, como mencionaba con el trío protagonista. El hecho de que Carnahan y McLeod se atrevan a presentar a una mujer fuerte y afroamericana como parte de los protagonistas y enfrentada a los dos hombres blancos me daba bastante miedo en un inicio por si no conseguían crear una buena representación, pero no ha sido así; su trabajo en este aspecto resulta encomiable. De todos modos, no se intenta profundizar demasiado en la psicología de los personajes y sus vidas privadas o pasadas son presentadas a través de pequeñas trazas que aportan verosimilitud y empatía, pero con las que no se entretienen demasiado.

El trabajo de Joe Carnahan me parece acertado. Los juegos de angulaciones de cámara y los acercamientos y alejamientos de los personajes resultan ideales para moverse por el escenario y seguir la trama desde cualquier punto de vista. No estamos ante el esquema de velocidades y alturas vertiginosas de Ambulance (Michael Bay, 2022), pero el emplazamiento y las coreografías de los actores funcionan muy bien en la pantalla y sacan brillo a todas las escenas.
Juego de Asesinos; Duelo de egos

Y es que la dirección de fotografía no decepciona y regala multitud de planos picados (cómo disfruto los cenitales…), contrapicados y encuadres claustrofóbicos que se relacionan con el escenario. Incluso las escenas exteriores nocturnas y sus respectivas “noches americanas” me convencen bastante, si no se tienen en cuenta las habituales sombras duras.Pero lo mejor, o uno de los elementos más destacables, es el diseño de sonido, que sabe explotar el ritmo, la tensión y las voces de los personajes, cohesionándolos con una música muy acertada. Para que se me entienda, basta mencionar el tema que decora la apertura de la película: la canción de Lalo Schifrin para Magnum Force (Clint Eastwood, 1973). Juego de asesinos empieza dándonos lo que queremos oír y no decae a partir de ahí.

Juego de Asesinos; Duelo de egos
Joe Carnahan siempre es sinónimo de un buen espectáculo, aunque casi nunca consigue destacar más allá de una buena combinación de elementos y de un resultado agradable de ver y no tan digno de recordar. Esta no es una excepción.Juego de asesinos (Copshop) se siente como un fresco homenaje a todas las películas policíacas setenteras en las que los personajes guían a la trama. En definitiva, la acción frenética del final y los giros argumentales harán que todos los espectadores salgan satisfechos de la sala. 

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    • ##check## Lo bueno
      • Protagonistas y secundarios interesantes.
        Diseño de sonido muy cuidado, acompañado de una banda sonora expresiva.
        Final con una acción desenfrenada.
    • ##times## Lo malo
      • Los giros argumentales y las escenas explicativas pueden resultar algo liosas.
        La primera hora puede llegar a cansar a algún espectador.
        Resulta un poco plana y sencilla en ocasiones.

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    • Ambientación 6.0
      • Casi toda la acción transcurre en un solo espacio, la comisaría de policía, pero arte y fotografía consiguen sacar un buen partido de sus claustrofóbicas paredes. El resto del lugar se retrata como lo que es: desolado, árido, un pueblo pequeño perdido en el estado de Nevada.
    • Desarrollo de Personajes 5.5
      • Los personajes evolucionan, pero a favor del truco de la moneda (giros argumentales) que se construye en el guion. Las personalidades que muestran los personajes, aunque moldeables, se mantienen a lo largo del metraje. No es lo que de verdad importa a Carnahan, que prefiere jugar con las dobles moralidades y no tanto con la catarsis de personajes.
    • Argumento / Guion 6.5
      • Hay muchas decisiones inteligentes, pero a nivel escrito predominan más los trucos fáciles que, de todos modos, funcionan bastante bien. Con un guion partido a la mitad por la hora de película, el diálogo y la relación de personajes distan de la acción pura de sangre y tiroteos que nos regalan al final y que consiguen romper la tensión creada desde el inicio.
    • Banda Sonora 8.5
      • La banda sonora, especialmente si nos fijamos en el diseño de sonido, es de lo más destacable de Copshop. Personalidad y mucho estilo, a veces me recuerdan a los videojuegos más noir con el repiqueteo del piano y las notas agudas.
    • Entretenimiento 8.0
      • Los últimos 45 minutos entretendrían a cualquiera, pero creo que todo el metraje consigue mantener un ritmo adecuado y no se desprende de esa característica pulp tan aclamada por las masas.
    • Montaje / Innovación técnica 8.0
      • El actor Frank Grillo exige un corte del director porque, según él, la edición de la película “castró” su actuación, provocando alguna que otra crítica de público y prensa. Desde luego, la edición no busca ahondar demasiado y prefiere mantener el tono poco detallado de las escenas. De todos modos, el montaje consigue mantener el ritmo y tono adecuados para captar la atención e intentar no decaer en esa primera hora más calmada. No descubre la pólvora y será olvidada por muchos, pero el trabajo de edición me resulta bastante adecuado.
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    • Puntuación Total  7 / 10
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Trailer:Fuente Imágenes: Diamond Films


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