Juego de tronos [tercera temporada]

Mentiría si dijera que la tercera temporada de Juego de tronos no era una de las más esperadas de este 2013. Para los que nos hemos leído el libro en el cual está adaptada (la primera mitad), Tormenta de espadas, sabemos por qué lo era: no encuentro las palabras adecuadas para describir todo lo que sucede y todo lo que hace sentir y vivir a sus lectores y para los que no, ya nos habíamos encargado en dejaros claro que ibais a alucinar.

[Primera temporada – Segunda temporada]

Libre de spoilers.

Los Siete Reinos continúan inmersos en la gran guerra que tiene lugar. La temporada anterior finalizaba dando por concluida una de las batallas más espectaculares, así que los primeros capítulos dan a entender que los implicados se encuentran en calma para un nuevo asalto. Sin embargo, es una falsa tranquilidad ya que se va viendo, más que nunca, como las conspiraciones pueden dar grandes giros en la historia y sorpresas que dejan con la boca absolutamente abierta. Sobre el argumento más no puedo decir sin desvelar hechos importantes. Es difícil hacer una reseña del libro o de la serie porque cualquier comentario, mencionar a X personaje ya es sinónimo de spoiler.

De los tres libros de Canción de hielo y fuego que llevo por ahora leídos, Tormenta de espadas fue el más impresionante, por lo tanto, tenía muchas expectativas frente a la serie. En general han hecho una buena adaptación de la primera mitad de la novela (la segunda mitad equivaldrá a la cuarta temporada), personajes que no habían aparecido en la segunda temporada –que era dónde les tocaban- lo han hecho ahora. Es imposible reflejar todo el libro y menos como éstos, enormes y llenos de sucesos y detalles, pero

la idea de la trama, la personalidad de los personajes es muy fiel y eso es algo que valoro mucho. Sí que me gustaría mencionar el hilo argumental de cierto personaje que en la novela no aparece, es decir, al final del segundo libro desaparece y no vuelve aparecer en todo el tercero; sin embargo, en esta temporada si que se ha visto qué es lo que sucede con él (supongo que lo que he visto equivale al próximo libro). Al principio es algo que me molestó, pero con el paso de los capítulos me intrigaba mucho al no saber qué iba a ocurrir con él.

La crueldad, la fe, el miedo, la venganza, la esperanza son algunos de los sentimientos por los que los personajes navegarán. Saben en qué están metidos y juegan sus cartas de la mejor manera. Unas veces ganan, otras pierden, pero siempre y hagan lo que hagan tendrán sus consecuencias; es algo clave en esta temporada. No quería comentar nada sobre mis personajes favoritos porque para mí es igual a spoiler saber quiénes siguen vivos, pero ya que algunos salen en los carteles promocionales aprovecharé: en esta temporada estamos conociendo más a Jaime Lannister y junto a Brienne de Tarth se han convertido en mis nuevos personajes favoritos, espero grandes cosas de ellos; Jon Nieve y Tyrion Lannister siguen siendo los que más apoyo y mi odio por Joffrey Baratheon no ha disminuido lo más mínimo, todo lo contrario.

Por lo que hace a esos momentos tan álgidos debo decir que me han sido más que satisfactorios, los esperaba con gran impaciencia y sólo puedo decir que han pasado demasiado rápidos. Toda la temporada ha sido para mí un suspiro y he echado de menos las series de veinte capítulos, puesto que con diez se me queda muy corta. La violencia de estas escenas sigue el nivel de la novela, aunque no sé porque me han parecido mucho más impactantes en en el libro, supongo que porque fue mi primer contacto con ellas y porque, como ya he dicho, todo pasa muy rápido. Aún así, chapó tanto por cómo ocurre todo y por la banda sonora que da al momento la importancia que se merece (y sí, me refiero al episodio 9).

Si creéis que esta temporada ha sido increíble, esperaros a la siguiente, ese tipo de sorpresas siguen siendo muy presentes.