Sony celebra una vida de triunfos, buenos personajes y mejores historias, y lo hace con un título de lucha de 4vs4 homenajeando a ¿todos? los grandes iconos que poblaron sus múltiples sistemas. Un asunto complicado, ya que tiene que funcionar para satisfacción de fans y de los amantes de los fighting games.
La mejor forma de disfrutar del título, a lo loco
Para ti, que eres fan de Sony
Las cosas como son, Sony no es Nintendo ni tampoco lo es Sega. No cuenta con personajes de largo recorrido, sino con viajeros que van y vienen. Crash Bandicoot dio paso a Spyro y éste a Nathan y éste a Kratos y éste a…. Sus héroes se suceden en el tiempo y se solapan. Cuando todos pensábamos que la estrella de la firma era Crash, el marsupial (o lo que sea que sea este bicho) desapareció. De hecho, lo absolutamente inconfundible de Sony es su estilo visual, el sonido de encendido de la PS2, los triángulos, círculos, cuadrados y equis. La mascota real de Sony es un sentimiento, como quien huele un par de huevos fritos con chistorra y le recuerda a su abuela la de la aldea. Eso es Sony. Sí, Sony es “menús”.
Es por ello una pena que los menús de este título sean tan malos, tan faltos de mimo, tan parcos, cutres y feos. No te ponen cachondo y deberían conseguirlo, porque ha de haber un sentimiento tras esta compilación. Tampoco en la presentación de personajes. Deberían haberse fijado en el crossover Street Fighter x Tekken. Animaciones, explosiones, sonrisas, movimiento ¡¡Movimiento!! Pero no, PASBR es el rey del estatismo y la sosez. No lo entiendo, menos si tenemos en cuenta lo que creo que para todos es Sony.
Los personajes se entregan también sin cariño. El modo aventura se presenta a través de escenas estáticas donde nos narran sus motivaciones pero sin contarnos nada nuevo ¿Dónde está el amor, Sony? ¡¿Dónde se esconde el amor en este maldito Blu-Ray?? Pues en los escenarios.
Sí amigos, los escenarios son gloriososo, dinámicos, bonitos, vivos, interactivos y épicos. Lo que no se hace con los personajes se hace con los fondos, con los rings donde luchamos. Una ambientación se funde con la otra, estás partiéndote la cara en el inframundo de Kratos y aparecen los Patapones con su música (¡¡¡Qué le jodan a Crash!!! ¿¿¿Por qué no puedo jugar con un Pata-pata-patapón???). Pero los maravillosos escenarios no hacen más que poner el acento en esta dualidad. Presentación falta de cariño, personajes puestos sin amor pero escenarios gloriosos ¡Eh! Sabías hacerlo, ¿qué ha pasado? ¿Cómo se ha podido descuidar este aspecto?
Otra cosa rara es el tema de los doblajes. Escuchar una conversación entre Cole y Raiden, uno hablando en español y otro en inglés, entendiéndose ambos como si lo hicieran en el mismo idioma, es algo muy loco.
Escenarios de diez combinan con una selección muy loca de personajes
Para ti que eres un amante de los fighting games
Lo primero que hice fue hacerme el tutorial. Me encantan los juegos de lucha pero tengo morcillas por dedos. Jamás fui capaz de hacer ni un cutre focus-dash-combinado con ultra del Super Street Fighter IV. Sin embargo, este título ofrece un puntito muy interesante en cuanto a combos se refiere y respuesta del personaje a los mandos, resulta sencillo ejecutar los combos, exige un poquito de maña pero se ejecutan sin problemas. Cuatro botones, el x para saltar y los demás para ejecutar distintos golpes. Si combinas una de las cuatro direcciones con un botón te sale un golpe distinto. Oye, pues no está mal. Salgo del tuto convencido. Por supuesto, tienes la ya habitual prueba de combos con cada personaje, para que domines lo básico.
Me lanzo al modo arcade. Tras llorarme los ojos con las escenas estáticas de introducción, descubro que el título se deja jugar bien. La historia es machacar al rival, con cada golpe nos dan puntos, con estos puntos se nos sube la barra de ultra (hasta tres niveles), pegando con el ultra eliminamos directamente al rival y nos ganamos puntos en la clasificación general. Quien más tenga, gana. Pues me gusta.
El problema llega cuando me pongo con el online. Primer escollo: se tarda mucho en encontrar un combate, segundo escollo y fundamental: la hitbox es una cosa muy rara y cuando cuatro tíos se ponen a pegarse a la vez, lo de pulsar arriba o abajo para combinar con el comando elegido se hace una cosa extraña. Enganchar un combo se vuelve algo muy complicado, algo que requiere mucha planificación. El zoom va y viene y mantener pulsado “adelante” para tener que soltarlo y machacar el cuadrado sin ninguna dirección para que haga bien el combo es difícil, requiere mucha práctica. Donde el juego brilla es cuando te tienes muy controlado a tu personaje y peleas dos contra dos. Hace falta ir de la mano con otro jugador, hace falta una comunicación directa, pero cuando tienes todo controlado, la hitbox falla, es muy loca, no la acabo de comprender. A veces das, otras no, cuando dos golpes se encuentran, reaccionan como quieren…. Te quedas bastante confuso preguntándote ¿Es un juego casual donde pegarse y echarte unas risas? Pues no, porque el sistema de lucha tiene chicha ¿Es un título para echarle horas, aprender y competir? Pues tampoco porque el core del título no está excesivamente pulido…. raro.
ponte aquí a hacer un combo elaborado…
Para ti que te molan los partygames
Aquí hemos llegado a lo bueno. Este título se hace muy divertido si juntas a varios amigos. Para empezar siendo dos. Olvídate de ser tú solo un crack, no lo acabas de apreciar. Has de plantearte el título como pareja. Haciendo eso, todo los defectos del sistema de lucha pasan a ser elementos estratégicos de los que aprovecharse o huir. Se puede combinar un personaje más zoner con otro más de machacar o pasar de todo y meter dos Kratos (los odio muy fuerte) y barrer a tus rivales. Cuando te olvidas de que el juego quiere homenajear a Sony, cuando te quitas del coco que quiere pretender ofrecer un sistema de lucha perfecto, es cuando comienzas a apreciar las bondades de este producto. Escenarios que brillan, ítems que corretean por la pantalla, remontadas épicas, un sistema de lucha que funciona a un nivel intermedio y personajes ya conocidos. No recordarás esto como el juego recopilatorio definitivo, tampoco como el brawler total pero sí como ese título con el que te has descojonado de lo lindo yendo a casa de tu colega. Un partygame para hardcores, eso es Playstation All-Stars Battle Royale y tras esa perspectiva funciona perfectamente.
::VALORACIÓN FINAL::
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