El crecimiento del bebè està estimulado desde su nacimiento por el contacto fìsico y afectivo, especialmente de la madre. El juego constituye una parte fundamental en este desarrollo pues es una manera de experimentar y de expresarse, de establecer contacto con el mundo exterior. Por eso es tan importante que los adultos estimulemos y respetemos el juego infantil.
El juego es la actividad fundamental del niño. Mediante los juegos iniciales el bebè construye su cuerpo y como parte importante del mismo, su sistema nervioso. Ese mecanismo de construcciòn es binario, funciona por oposiciòn y contraste y su realizaciòn inicial se produce mediante la exploraciòn de texturas, superficies, consistencias y agujeros. Los primeros objetos de juego del bebè son su propio cuerpo, el de su madre, las babas, el alimento, el pis, la caca, los elementos de su higiene, la ropa y cualquier objeto a su alcance.
Para el bebè es primordial la relaciòn primaria con esa parte imaginaria de su propio cuerpo que es el pecho de la madre. Es el eje alrededor del cual giran las 24 horas del dìa.Por su presencia y por su ausencia alrededor de este intermitente eje se activa el desarrollo psicosomàtico del bebè y se dan los primeros pasos en la constituciòn de su personalidad. El pecho suministra alimento, pero no es su ùnica funciòn. Cuando la madre no puede dar el pecho, puede optar por el biberòn, pero mientras que es habitual amamantar con un ritmo relajado, el biberòn se transforma fàcilmente en un instrumento de cantidades y medidas que el bebè puede ingerir sistemàtica y mecànicamente. La madre debe dar el biberòn con la misma dedicaciòn y cuidado con el que amamanta.
El bebè construye su oralidad en la relaciòn con el pecho, mira fijamente a su madre, la madre lo mira, construye la mirada, la madre le habla, su oìdo reconoce y goza de la voz, con la cual construye el lenguaje. Y en el proceso de defecaciòn, las heces son la primera sustancia "creativa" que produce por èl mismo. Pecho y boca, heces y ano, mirada y ojo, voz y oìdo, son los obejetos y bordes corporales alrededor de los cuales se constituye la demanda y el deseo, motor de la vida y objetos de la actividad lùdica del bebè.
Juan Pundik. Psicoanalista. Presidente de la Plataforma contra el Prozac y la medicalizaciòn de la infancia. Presidente de Filium y autor de El Niño Hiperactivo, dèficit de atenciòn y fracaso escolar y La Vida Medicada. (Ed. Filium)
Esta entrega es la primera parte.