Julián Hernández (Siniestro Total), “Hemos vivido un espejismo absoluto hasta que el capitalismo ha decidido cargárselo todo”

Imagen obtenida del Myspace del grupo

En la segunda parte del encuentro con Julián Hernández, el artista se sincera con Ruta 42 en aspectos mucho más personales, como su punto de vista acerca de la evolución de Siniestro Total con el paso de los años, la crisis económica y su consiguiente repercusión en la industria musical o su relación con la banda Porretas y su cantante Rober, fallecido el pasado año.

¿Cómo crees que ha evolucionado el grupo con el paso del tiempo?

Pues sinceramente no lo se. De hecho, si quieres que te responda de una forma algo tajante, creo que realmente no hemos evolucionado (risas). Yo pienso que quizás lo único en lo que hemos cambiado con el tiempo es que la última formación, con la que ya llevamos más de 10 años, es mucho más sólida que las anteriores; estamos bien como estamos, hacemos lo que queremos y realmente trabajamos mucho más duro que antes. Quizás sea en eso en lo que más hemos evolucionado porque lo habitual es que un grupo a medida que envejece se vaya volviendo más vago y sin embargo nosotros en los últimos años entre el disco de Country & Western, lo del T.A.C. y esta gira nos hemos quedado sin vacaciones, así que podríamos decir que nuestra evolución ha ido hacia el estajanovismo.

Ahora que se acercan ya las fechas veraniegas, que la mayoría de los grupos nacionales están confirmando su asistencia a distintos festivales ¿Tenéis ya algo concretado u os planteáis prolongar esta gira?

La gira en principio está limitada a 16 conciertos. Terminamos a comienzos de junio con este proyecto y sí que tenemos ya algunas fechas marcadas para hacer algo distinto en verano. Lo que ocurre es que ahora mismo estamos en modo “Tierra ignota”; vamos a saco con esto, ya que supone una renovación de repertorio salvaje y esto limita muchos tus planes. Lo que también sucede es que este concepto nos está gustando mucho y ya que después de tantos años nuestro repertorio es gigantesco, posiblemente dentro de un tiempo decidamos seguir cabalgando por territorios inexplorados con otros de nuestros temas.

Pero supongo que a pesar de estar rescatando temas antiguos no habréis dejado de lado la creatividad ¿Estáis trabajando actualmente en nuevos temas para un futuro disco?

El principal problema de esta gira es que es tan apretada que resulta muy difícil poder hacer otra cosa, no disponemos de tiempo material. Seguimos también con la idea de llevar el T.A.C. fuera de Galicia, pero es un montaje muy caro ya que se compone de veinte músicos más nosotros cinco y eso es mucho más costoso que llevarnos a una sala. Por eso ahora no nos planteamos sacar un disco nuevo aunque desde luego que siempre estamos con algo entre manos.

Imagen obtenida del myspace del grupo

Ahora que has tocado el tema económico ¿No crees que la actual crisis ha hecho que los ayuntamientos, los promotores arriesguen mucho menos a la hora de contratar grandes eventos?

La situación está clara, esto es un desastre absoluto; hemos vivido un espejismo absoluto hasta que el capitalismo ha decidido cargárselo todo y nos hemos dado cuenta que nos encontrábamos en una especie de limbo absurdo en el que pensábamos que todo era estupendo y maravilloso y de repente nos han enseñado la verdad a la cara y nos hemos dado cuenta de que no, que nos han estado engañando mientras les venía bien. Cuando ya no les ha convenido han dejado de engañarnos y nos han enseñado los dientes.

Con la música pasa lo mismo. Recuerdo una frase de Miguel Ángel Martín, que hablando un día sobre lo que fueron los grandes cracks de la música en España, como Radio Futura, El Último de la Fila, Dover… comentó que después de todo esto hemos vuelto a las catacumbas que es ese sitio del que nunca deberíamos haber salido. Tenía que haberse creado una industria suficientemente sólida, sin depender tanto de dinero oficial ni de grandes eventos subvencionados y cosas por el estilo. Se tenía que haber partido desde la base y más en un país con un circuito de actuaciones tan pequeño comparado con otros países. Lo decía el otro día Eduardo Mendoza, que parecía cómo si hubiésemos olvidado en los últimos años lo cutre que es España.

Pero sin embargo no paran de aparecer grupos nuevos y además con gran potencial. Hace tiempo, hablando con el guitarrista de un conjunto, comentó que parece como si en los últimos años hubiera más bandas musicales que gente con ganas de escucharlas…

(Risas) Eso también es verdad. Yo entiendo que la comunicación permite que actualmente la gente pueda conocer mucha más música y pueda estar mucho más enterada. Antes era mucho más complicado comprar discos e incluso adquirir instrumentos. Ahora son mucho más baratos y están al alcance de cualquiera. Incluso existe también la posibilidad de grabar con buena calidad en el ordenador en tu propia casa cuando antes lo máximo que podías llegar a tener es un cuatro pistas cutre que no te daba para nada. Pero yo creo que este fenómeno forma parte de una cultura mucho más amplia y que llega a más gente, por lo que lo lógico es que también los jóvenes compren instrumentos y se pongan a tocar porque es lo que hemos hecho todos, imitar lo que nos gustaba.

Este abaratamiento que comentas, incluso el propio hecho de la caída de la industria musical ¿No crees que puede ser de alguna manera positivo para que el rock and roll vuelva a tener independencia frente a las multinacionales?

Bueno, realmente fuera de las multinacionales ya casi está todo (risas). Las grandes empresas ya están que echan humos. Son estructuras muy lentas y muy grandes y entonces reaccionar ante situaciones nuevas les cuesta mucho trabajo. Pero yo creo que en ocasiones la necesidad agudiza el ingenio. Nosotros siempre lo hemos hecho un poco así, primero con nuestro trabajo y luego ya la discográfica de turno lo ha sacado a la luz, pero siempre hemos tratado de aplicar el Do it yourself desde el primer día. Entonces en nuestro caso no es algo que nos pille muy de sorpresa. Esto realmente es también un filtro para que la gente seleccione lo que quiere ofrecer, el trabajo que está haciendo. Ya va a estar fuera de lugar el hacer un grupo para graba una maqueta, llevarlo a una multinacional y que te hagan un lanzamiento internacional con tropecientos mil millones de pesetas de promoción. Eso ya se va a acabar y la industria va a tener que tirar por otro camino.

Repasando un poco tu repertorio personal he topado con una colaboración en el tema “Joder que cruz” de Porretas. ¿Cómo ha sido tu relación con el grupo y especialmente con su cantante Rober, recientemente fallecido?

Rober fue amigo mío desde hace mucho tiempo. Nos conocimos prácticamente cuando comenzaron ellos y además hemos coincidido con Porretas en multitud de ocasiones en los escenarios. El tema de cantar con ellos en “Joder que cruz” fue bonito pero extraño, porque Roberto estaba ya fatal y cuando murió fue un palo tremendo para todos. Realmente fue con el primero con el que llegué a tener relación de su grupo, aunque con el resto también es estupenda. La canción en cuestión además me gusta mucho.

Es normal que te guste porque tiene un claro toque de irreverencia que es innato a vosotros…

Bueno, tampoco es una pretensión ser irreverentes pero desde luego que es algo que sale por si mismo. Posiblemente, pese a que somos un poco más eclécticos que ellos, es un aspecto que nos acerca a Porretas.

Ya que estamos hablando de este parecido con otros grupos me gustaría saber cual es para vosotros el conjunto con el que más os identificáis a día de hoy. Al igual que a los nuevos conjuntos se les pregunta por sus influencias ¿En qué grupos crees que habéis influido más?

Nosotros no tenemos esa conciencia en absoluto. No queremos haber influido en nadie, te lo digo de corazón. No nos vemos reflejados en nadie en concreto, pero para bien. A lo mejor son más los grupos que hayamos versionado y que hemos dado a conocer a otra gente que los que tengan influencias nuestras. Pero más allá de esto no nos reconocemos en nadie y eso es positivo porque veo mucho mejor que la gente vaya por libre y se dedique a hacer sus cosas.

Con esta reflexión terminó la charla con Julián Hernández quien, tras dar un concierto en Valladolid con su banda Siniestro Total el pasado 26 de abril, continúa con la gira “Tierra Ignita”, que les llevará por distintos puntos del territorio nacional. Treinta años son muchos, pero parece como si para los gallegos el paso del tiempo solo supusiera un aliciente para seguir dando guerra con su estilo inconfundible y sus letras incendiarias.

Una información ofrecida por Alberto Salazar

Ruta 42

Blog - Más publicaciones