Julieta tiene una sonrisa preciosa, 10 años y le encanta el chocolate. Sus papás dedican sus vidas a cuidar de ella y de su hermano, mientras trabajan para la comunidad. Se trata de un trabajo a tiempo completo que no permite vacaciones y les obliga a estar siempre de guardia. Lo que hace su historia peculiar es que trabajan dentro de una prisión, por lo que tanto Julieta, como su hermano sólo conocen el mundo limitado por esos muros. Como cualquier niña del mundo, eso no le impide soñar con volar.
Revista Diario
Julieta tiene una sonrisa preciosa, 10 años y le encanta el chocolate. Sus papás dedican sus vidas a cuidar de ella y de su hermano, mientras trabajan para la comunidad. Se trata de un trabajo a tiempo completo que no permite vacaciones y les obliga a estar siempre de guardia. Lo que hace su historia peculiar es que trabajan dentro de una prisión, por lo que tanto Julieta, como su hermano sólo conocen el mundo limitado por esos muros. Como cualquier niña del mundo, eso no le impide soñar con volar.