Junai Tokkô Taichô!, de Shizuru Seino

Al hilo (nunca mejor dicho) de mi segundo #RecomiendaPSS de Heaven!! me picó el gusanillo de leer la siguiente serie de la autora, de la que tenía varios tomos pero que nunca había tocado, o al menos no recordaba nada de ella. Así pues, junto a la arriba mencionada y Power!! - Girl Got Game ésta es mi tercera reseña de una de las obras de Shizuru Seino, una mangaka que se especializa en la comedia... o lo hacía. Ahora iré a ello en la reseña.En cuanto a esta serie, consta de 13 tomos pero lo cierto es que queda abierta y tiene una secuela titulada Honki o Maji (no sé cuál es el título más correcto por la forma de leer los kanjis y he visto ambas versiones en varios sitios) de otros cuatro tomos. No sé qué motivó esta división pues no parece que haya un lapso de tiempo muy grande entre el final de la principal y la continuación. Tampoco hay cambio de revista, ni de editorial. Así pues, de momento me limito a reseñar la serie principal al no haber encontrado la continuación. Si en un futuro doy con ella, la reseñaré aunque sea por completar y salir de dudas de cómo cierra la historia.ArgumentoChiemi Yusa es una estudiante que no para de meterse en peleas aunque siempre sea por una causa justificada. Aún así, está a un paso de la expulsión. Su tutora le propone un trato: no será expulsada si a cambio consigue que Akifumi Hirata, otro estudiante que también se mete en peleas, falta a clases y tiene bajas notas, se reforme. Vamos, que le pasa el marrón para que se lo coma ella con la excusa de que siendo parecidos y de la misma edad, puede tener más éxito.
Poco después de esa reunión, Chiemi le ve inmerso en mitad de una pelea y no duda en saltar en medio, darle una patada y decirle que no haga esas cosas en el instituto. En cuanto termina de sermonearle, sale corriendo antes de que le responda nada... o le haga algo peor. Akifumi se presenta en clases con la mirada muy seria y, delante de todo el mundo... ¡le pide que salga con él! Chiemi no tarda ni un minuto en decirle que ni hablar, total, no se conocen, y a él no se le ocurre otra cosa que llevársela de clases para así poder conocerse mejor. 
La cuestión es que, a partir de ese momento, Chiemi va descubriendo de él cosas que la sorprenden como que no es el gamberro que aparenta, que trabaja muchas horas en una gasolinera y por eso suele faltar a clases y que hace ese esfuerzo por ayudar a su abuela, de quien dependen él y su hermano pequeño tras la muerte de sus padres. Un sentimiento cálido empieza a nacer en su corazón y lo que había empezado de aquella manera da lugar una bonita relación entre los más brutos del instituto.ReseñaComo ya he dicho más arriba, la autora brilla en el género de la comedia. La mejor parte de Power!!, una serie bastante errática en su desarrollo, me pareció el final en que se decide por el absurdo total. Luego, Heaven!! es pura risa de principio a fin aun cuando mete ciertos puntos de drama y romance. Pues, por desgracia, eso que la hacía especial lo abandona para hacer un romance de instituto muy básico donde sólo hay ciertos momentos en que su humor disparatado reaparece. Esto no sería malo de por sí, hay cientos de shôjos románticos de instituto geniales, pero aquí coge lo peor del género.Para empezar, os podríais leer el primer capítulo y dejar la serie ahí pues funciona perfectamente como oneshot. De hecho, en parte es lo que me gustaría haber hecho porque deja muy buen sabor frente a, en líneas generales, lo que sigue. La mayoría de las historias que empiezan a crecer a partir de un oneshot sin una trama definida detrás pecan de lo que le pasa a ésta: desarrollo mediocre a base de ir introduciendo personajes nuevos que se interponen entre los protagonistas. Hay muy poca evolución de pareja por ellos mismos, todo se reduce a superar los obstáculos que otros suponen. Incluso el padre de Chiemi ocupa uno de esos arcos siendo tan ridículo todo que encierra a su propia hija en casa y le impide ir al instituto. No es gracioso, como la autora lo enfoca, es un maldito delito, es maltrato y es estúpido. Y, luego, los que se interponen entre la pareja que son de su edad son unos egoístas y/o melodramáticos y/o psicópatas que me han hecho resoplar e incluso leer pasando muy por encima.Y había posibilidades de haber tenido un buen shôjo con las semillas plantadas al inicio de la serie. Los protagonistas son adorables pero muy torpes en el amor dada su inexperiencia, así que habría sido muy bonito ver su evolución sin terceros incordiantes. Además, está la situación familiar y económica de Akifumi, en la que no se profundiza nada. Con dicha situación y sus malas notas ¿qué piensa hacer en el futuro? Y la misma Chiemi ¿qué quiere hacer con su vida? También se podría haber profundizado en los secundarios pero lo único que nos da de todos ellos es el desarrollo de una segunda pareja pero en capítulos tan contados y tan separados entre sí que cuando la retoma ya no tiene ni gracia. Quizás todo esto esté en la secuela pero 13 tomos son demasiados para lo poco que da de interés y lo mucho que da de malos entendidos exasperantes.Lo peor del desarrollo tan regulero que tiene es que desdibuja mucho a los protagonistas. Chiemi era originalmente una chica fuerte y bruta, se podía defender por ella misma y tenía unos estándares éticos muy altos por los que no pegaba si no era por algo justificado. Pues según avanza la trama o es violenta de manera desproporcionada o se vuelve una doncella que necesita ser rescatada cuando debería usar su fuerza. Y Akifumi igualmente también se sale de su personaje en varios momentos y toma unas decisiones que no hay quien entienda. Ambos pecan de dudar del otro y parece que el ir superando los obstáculos de los terceros que se interponen no les enseña nada de cara a los siguientes.La serie, en todo caso, no es un absoluto desastre: hay momentos cómicos de ésos que la autora sabía dibujar que son muy buenos y la pareja principal tiene sus momentos tiernos y dulces a pesar de estar en medio de tanto melodrama.En general y por ir terminando, un shôjo bastante decepcionante. Os recomiendo que os leáis el primer capítulo como oneshot y lo dejéis ahí. O quizás podáis seguir unos tomos más pero ya sabéis que irá cuesta abajo en cuanto aparezcan los rivales. Había potencial, buenos personajes de partida, buen dibujo y toques cómicos pero cuando no hay trama pensada para tener de fondo pasa lo que pasa, que el desarrollo es un desastre. Y sumadle a esto la sensación de "estafa" porque la serie acabe abierta para seguir en una secuela que es continuación directa.